MADRID, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, ha ordenado la liberación "inmediata" de todos los prisioneros de guerra, en línea con lo pactado en el acuerdo de paz firmado hace cerca de dos semanas con el principal líder rebelde, Riek Machar.
En un decreto leído a última hora del jueves y emitida por la cadena de televisión estatal SSBC, el mandatario ha resaltado que el proceso de liberaciones estará supervisado por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Asimismo, ha ordenado al Ejército que ponga fin a las tareas de entrenamiento y reclutamiento de militares y ha reclamado que se ponga fin a los ataques, que suponen una violación del acuerdo de alto el fuego vigente en el país, tal y como ha recogido la emisora local Eye Radio.
Machar, quien es vicepresidente designado en virtud del acuerdo, reclamó la semana pasada a Kiir que libere a todos los presos políticos y retire el estado de emergencia de cara a su desplazamiento a la capital, Yuba.
El acuerdo de paz contempla la restitución de Machar, líder del Movimiento de Liberación del Pueblo de Sudán-En Oposición (SPLM-IO), en el puesto de vicepresidente, así como la creación de un Gobierno de unidad en el que tendrá la mayoría el actual Ejecutivo. Asimismo, Kiir permanecerá en el puesto de presidente.
Las partes tendrán ahora ocho meses para formar un gobierno de transición, que estará en vigor durante un periodo de tres años.
Sudán del Sur vive sumido en una guerra civil desde diciembre de 2013 que enfrenta a los partidarios de Kiir, de etnia dinka, con las fuerzas leales a Machar, de etnia nuer. Otros grupos rebeldes --con distintos grados de relación con el grupo de Machar-- operan en el país.
Naciones Unidas ha alertado en varias ocasiones de la posibilidad de un genocidio en el país, debido al cariz étnico que parece estar tomando el conflicto.
Los combates en Sudán del Sur han desarraigado alrededor de una cuarta parte de sus 12 millones de habitantes, han destruido la producción de petróleo y han arruinado una economía ya de por sí muy empobrecida.
