VIENA 21 Feb. (EP/AP) -
El enviado especial de la ONU para Kosovo, Martti Ahtisaari, declaró hoy que los serbios y los albano-kosovares se mantienen inflexibles en sus posturas iniciales respecto a los puntos principales de su plan sobre el futuro de la provincia.
En todo caso, Ahtisaari explicó en rueda de prensa que las negociaciones que comenzaron hoy en Viena suponen "un buen comienzo" en los esfuerzos por definir el futuro de Kosovo y afirmó que la ronda de negociaciones ha comenzado en un tono conciliatorio.
No obstante, advirtió de que ambas partes no dan su brazo a torcer respecto al futuro de Kosovo. "Las partes no han acercado sus posturas, nos enfrentamos a la misma realidad", declaró.
La nueva ronda de negociaciones entre Belgrado y Pristina comenzó hacia las diez de la mañana de hoy en el Centro Austria de Viena. Las conversaciones, que estarán centradas en la solución propuesta por Ahtisaari --que fue presentada a las dos partes a principios de este mes--, concluirán el próximo 2 de marzo.
Mientras los albano-kosovares ya han anunciado en los días previos a la cumbre su deseo de que el plan permita alcanzar la independencia, el Gobierno serbio ha advertido de que no admitirá ninguna propuesta que no preserve la integridad territorial del país y ha expresado su esperanza de que el Consejo de Seguridad de la ONU bloquee cualquier plan que suponga una escisión en un "Estado miembro".
Martti Ahtisaari presentó el pasado 2 de febrero su propuesta, en la que no se menciona expresamente la palabra "independencia" pero sí se contempla que Kosovo goce de una amplia autogestión, que sería supervisada por la comunidad internacional, y que se conceda a la todavía provincia serbia todos los atributos propios de un Estado soberano --Constitución, bandera e himno nacionales--, así como el derecho a estar representada ante los organismos internacionales.
El proyecto prevé también la concesión de una amplia autonomía a las áreas de Kosovo de mayoría serbia, concentradas en el norte de la provincia. El sistema para Kosovo sería similar al de los Acuerdos de Dayton que pusieron fin a la guerra de Bosnia de 1992-95 y establecieron una administración internacional para supervisar los asuntos del día a día.
Kosovo ha estado bajo protectorado de la ONU desde 1999, cuando los bombardeos de la OTAN pusieron fin a la campaña de Serbia contra los separatistas albano-kosovares. La mayoría albanesa de la provincia quiere la independencia, pero Belgrado quiere que Kosovo siga formando parte de Serbia.