MOSCÚ, 16 Ene. (EUROPA PRESS) -
La decisión sobre el estatus final que deberá tener la provincia, hasta ahora serbia, de Kosovo, de mayoría étnica albanesa y religión predominantemente musulmana, debe satisfacer a las autoridades tanto serbias como kosovares, recalcó hoy el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov.
"La decisión del estatus de Kosovo debe ser equilibrada y alcanzada por medio de las negociaciones, y debe ser aceptable para las autoridades de Kosovo y Belgrado", insistió el ministro ruso, citado por la agencia Ria Novosti.
Ayer, el primer ministro serbio, Vojislav Kostunica trató el tema en una conversación telefónica con el presidente ruso, Vladimir Putin, de cara a la próxima presentación de su informe de recomendaciones ante el Consejo de Seguridad de la ONU del enviado especial para Kosovo, Marti Ahtisaari. El Consejo deberá votar después la propuesta --que podría proponer la independencia de la provincia de Serbia,-- después de que sea presentada tras la elecciones serbias del próximo domingo. Rusia, aliada en otros tiempos de la antigua Yugoslavia, mantiene derecho de veto en el organismo de la ONU.
Rusia ha mantenido que la independencia de Kosovo, a la que se opone Belgrado, podría tener consecuencias negativas para los conflicto no resueltos en la antigua Unión Soviética, que han comenzado a emerger tras la disolución de esta a principios de los noventa. "Una decisión forzada sobre el estatus de Kosovo está fuera de cuestionamiento", dijo Lavrov.
