ERBIL, 6 Oct. (Reuters/EP) -
El cuerpo del ex presidente de Irak y líder kurdo Jalal Talabani ha sido enterrado este viernes en su ciudad natal, Sulaimaniya, en el norte del Kurdistán, en una ceremonia en la que miles de kurdos se han acercado a la comitiva funeraria para despedirse del que ha sido uno de sus representantes políticos más importantes.
Talabani fue el primer presidente no árabe de Irak, después de que fuese elegido jefe de Estado en 2005, apenas dos años después del final del régimen de Sadam Hussein. Dimitió del cargo en 2014, tras una larga convalecencia por un ictus sufrido en 2012.
El ataúd del ex presidente ha recorrido las calles de Sulaimaniya cubierto con una enorme bandera kurda, al tiempo que se ha disparado una salva de 21 disparos. Tanto la televisión regional kurda como la estatal iraquí han emitido en directo el evento, al que han acudido miles de personas. Una banda militar ha tocado el himno iraquí al paso de la comitiva.
El expresidente se encontraba ingresado en Berlín, donde entró en coma este mismo martes. Su estado se deterioró rápidamente y, en cuestión de horas, los médicos certificaron su fallecimiento, según fuentes citadas por la agencia de noticias kurda Rudaw.
El hecho de que el ataúd estuviera cubierto por la bandera kurda en vez de la iraquí ha provocado rechazo por parte de ciertos sectores de la prensa más cercanos a Bagdad. La cadena de televisión Al Etejah, contraria a la independencia kurda, ha detenido su emisión de la comitiva funeraria al ver la bandera.
"La delegación del Gobierno ha criticado el hecho de que la bandera iraquí no estuviera cubriendo el ataúd, a pesar de que sí se ha tocado el himno nacional", ha asegurado un portavoz del Gobierno regional del Kurdistán.
Talabani era una de las figuras más reconocidas de la lucha kurda, principalmente por su papel al frente de la Unión Patriótica del Kurdistán (PUK). El grupo protagonizó a mediados de la década de los 90 un conflicto armado que costó la vida a más de 2.000 personas.
El fallecimiento de Talabani ha coincidido con el nuevo impulso independentista lanzado por el Gobierno Regional del Kurdistán, que convocó el 25 de septiembre un referéndum que concluyó con una abrumadora mayoría de votos --más del 92 por ciento-- a favor del 'sí' a la secesión. Las autoridades centrales han tachado de inconstitucional dicha consulta e impuesto un bloqueo total a la región.
De hecho, el avión de Iraqui Airways que transportaba el ataúd del líder kurdo ha tenido que recibir un permiso especial para atravesar el espacio aéreo.
