PARÍS, 4 Ene. (EUROPA PRESS/Javier Gómez Muñoz) -
Un decreto publicado hoy en el Boletín Oficial del Estado francés y aprobado ayer por el Consejo de Ministros pone fin al estado de emergencia aprobado el pasado 8 de noviembre por el Gobierno para hacer frente a la ola de disturbios que asoló los barrios más degradados del país.
El Gobierno decidió aprobar una medida excepcional que no se aplicaba desde 1955 para dar poderes adicionales a la policía en la lucha contra una revuelta callejera que dejó como resultado más de 10.000 coches incendiados, numerosos destrozos en edificios públicos, agresiones, más de 3.000 detenidos y 800 condenados.
El estado de emergencia permitió declarar toques de queda parciales en 82 municipios de siete departamentos, impedir temporalmente en algunas localidades la venta de bebidas alcohólicas o de gasolina a particulares y dio la posibilidad a las fuerzas policiales de llevar a cabo registros sin pedir órdenes judiciales.
La izquierda y varios sectores de la judicatura y la abogacía se manifestaron contra la extensión del estado de emergencia aprobada el pasado 21 de noviembre, cuando la Asamblea Nacional aprobó prolongarlo durante tres meses.
Las autoridades prefirieron esperar hasta las fiestas de fin de año para poner fin a este régimen de restricción de libertades, por temor a nuevos enfrentamientos. En Nochevieja se desplegaron 25.000 agentes por toda Francia, lo que no impidió que se quemaran 425 coches y se detuvo a 325 jóvenes. Cifras semejantes a las registradas en esa fecha en años pasados.