Líbano.- Las facciones rivales libanesas trabajan contrarreloj para lograr un presidente de consenso antes de mañana

Actualizado: jueves, 22 noviembre 2007 20:44

((Esta noticia sustituye a la anterior sobre el mismo tema))

Moratinos, Kouchner y D'Alema intentan mediar entre el Gobierno pro-occidenta y la oposición liderada por Hezbolá

BEIRUT, 22 Nov. (EP/AP) -

Los principales dirigentes políticos libaneses están trabajando contrarreloj para intentar lograr un candidato de compromiso que suceda al presidente, Emile Lahoud, antes de que expire mañana su mandato, aunque por el momento no parece haberse llegado a un acuerdo.

El Parlamento ha sido convocado para mañana a las 13:00 horas (12:00 hora española) para elegir al sucesor de Lahoud, tan sólo once horas antes de que concluya su mandato. Los tres intentos realizados hasta ahora de elegir a un nuevo presidente han fracasado debido a las diferencias entre el Gobierno pro-occidental de Fuad Siniora y la oposición pro-siria encabezada por Hezbolá.

Los libaneses temen que de no llegarse a un acuerdo y nombrarse un nuevo presidente se produzca un vacío de poder, lo que podría ser aún más peligroso, dos gobiernos rivales, como ocurrió durante los dos últimos años de la guerra civil (1975-90). Por todo ello, la celebración precisamente hoy del Día de la Independencia estuvo marcada por el pesimismo entre la población.

"El último día antes de la hora cero: un milagro o el vacío de poder", era el contundente titular del principal diario libanés, 'An-Nahar'. Por su parte, 'Al-Mustaqbal', propiedd del líder de la mayoría parlamentaria Saad Hariri, acusó a Siria de "bloquear" un compromiso con sus aliados libaneses.

Hariri y el líder opositor Michel Aoun, un cristiano que se alió con Hezbolá y que se presenta candidato a la presidencia, mantuvieron anoche un encuentro pero no consiguieron desbloquear la situación. La reunión se produjo tras una llamada telefónica a ambos del presidente francés, Nicolas Sarkozy, que ha estado encabezando la mediación entre ambos bandos a través de su ministro de Exteriores, Bernard Kouchner.

MEDIACION DE MORATINOS, KOUCHNER Y D'ALEMA

Aoun, que hoy se reunió con Kouchner y con el ministro de Asuntos Exteriores español, Miguel Angel Moratinos, indicó a la prensa que la reunión con Hariri no alcanzó ningún resultado. En este sentido, insistió en que él sigue siendo el mejor compromiso para ser el próximo presidente de Líbano y se describió a sí mismo como "una candidato de unidad nacional".

Hasta Líbano ha llegado también el ministro de Exteriores italiano, Massimo D'Alema, para sumarse a la mediación que están llevando a cabo Moratinos y Kouchner --este último lleva en el país desde el lunes--. Los tres países europeos son los principales contribuyentes de tropas a la Fuerza Interina de la ONU para Líbano (FINUL) en el sur del país.

El controvertido Aoun, que goza de una fuerte base de apoyo particularmente entre los cristianos y los chiíes, ha mantenido su nombre en la pugna por la presidencia después de que otros nombres que se plantearon como candidatos de compromiso hayan sido abandonados en los últimos días.

Para el bando que lidera Hariri, la elección de Aoun sería algo difícil de digerir, puesto que aunque fue durante tiempo contrario a Damasco, se posicionó junto a Hezbolá, aliado tradicional tanto de Siria como de Irán, durante la crisis política que atraviesa el país.

Siniora y la mayoría parlamentaria quieren imponer a una figura anti-siria para el puesto de presidente, esgrimiendo su exigua mayoría en el Parlamento, pero la oposición ha optado por boicotear las sesiones para la elección del nuevo jefe de Estado hasta que no se llegue a un acuerdo sobre un candidato que les parezca aceptable.

Así, en medio de este boicot, la sesión del 25 de septiembre fracasó porque no se logró el quoroum necesario y otras tres sesiones tuvieron que aplazarse tras no llegarse a un acuerdo. Ahora, el bloque antisirio está amenazando con elegir a un presidente por mayoría simple si no hay quorum, algo que se teme podría desencadenar violencia en las calles.

Por otra parte, a falta de presidente, en Líbano es el Gobierno el que asume los poderes ejecutivos, pero Lahoud ha prometido que no entregará su autoridad al Ejecutivo de Siniora, puesto que lo considera inconstitucional tras la salida de los cinco ministros chiíes hace un año.

Ante esta situación, existe la posibilidad de que Lahoud traspase el poder a los jefes del Ejécito, cree un Gobierno rival al que ceda el poder o incluso que declare el estado de emergencia.