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MADRID, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abul Gheit, ha emplazado a los actores políticos sudaneses a lograr una solución a la crisis política en la que se encuentra inmerso el país "sin intervenciones o dictados extranjeros".
Abul Gheit ha realizado estas declaraciones tras su reciente visita a Jartum, donde se reunión tanto con Abdelfatá al Burhan, jefe de la junta militar que gobierna el país desde el fin de la dictadura de Omar Hasán al Bashir, depuesto el pasado 11 de abril, como con representantes de la oposición aglutinada en las Declaración de la Libertad y las Fuerzas del Cambio.
Abul Gheit añadió que el constante caos en Sudán podría abrir la puerta a intervenciones extranjeras, mediaciones e intentos para perturbar el curso de los asuntos en el país. "Esto motiva a la Liga Árabe a mantener una fuerte presencia en la escena sudanesa para ayudar a Sudán a superar las dificultades actuales", ha argumentado Abul Gheit, según recoge la agencia de noticias china Xinhua.
La Unión Africana anunció el pasado 6 de junio que apartaba a Sudán hasta que hubiese una administración civil, en un ejemplo de la creciente presión internacional para que los actuales líderes dimitan.
Al Bashir, que gobernó Sudán desde el golpe de Estado militar de 1989, fue depuesto a su vez por el Ejército tras semanas de protestas en su contra.
Pese a la marcha de Al Bashir, las protestas no cesaron y se mantuvo la acampada de miles de personas frente al Ministerio de Defensa en Jartum. El Consejo Militar de Transición decidió entonces entablar un diálogo con los manifestantes y la oposición, aglutinados en torno a la Declaración de la Libertad y las Fuerzas del Cambio, para acordar la transición hacia un gobierno civil.
Inicialmente, la junta militar se dio de plazo dos años para la celebración de elecciones y el traspaso de poderes, pero los manifestantes, con la Asociación de Profesionales de Sudán (SPA) a la cabeza, así como las principales fuerzas opositoras se opusieron, rechazaron este plazo y exigieron la creación de un órgano de gobierno para el periodo de transición.
Las negociaciones se estancaron y el pasado 3 de junio las fuerzas de seguridad asaltaron la acampada en Jartum, dejando al menos 61 muertos, según el balance del Gobierno, y 113 según una organización de médicos afín a la oposición.
CONFLICTO PALESTINO-ISRAELÍ
Por otra parte, Abul Gheit ha destacado que cualquier intento de resolver el conflicto palestino-israelí sin la creación de un Estado palestino en todos los territorios ocupados militarmente por Israel en 1967 será "en vano".
Abul Gheit se suma así a las críticas al plan de paz que prepara Estados Unidos, el llamado 'acuerdo del siglo', y que según todos los indicios se alinea con las posiciones e intereses de Israel. En el marco de esta iniciativa se ha convocado una conferencia a finales de junio en Bahréin para impulsar la economía palestina a la que las autoridades palestinas han descartado ya su asistencia.
"Lo que rechacen los palestinos o los árabes es inaceptable" ha señalado Abul Gheit durante un acto de la Liga Árabe en El Cairo. "Lo que es aceptable por nuestra parte como árabes, como solución, es la creación de un estado palestino sobre las fronteras del 4 de junio de 1967 con Jerusalén como capital", ha argumentado, según recoge la agencia de noticias Reuters.
En ese sentido, ya reivindicado la Iniciativa de Paz Árabe presentada en 2002 por Arabia Saudí y que ofrece a Israel la normalización de las relaciones a cambio de la retirada de los territorios que ocupó en 1967. "Si (Israel) elige la única fórmula razonable y aceptada por nosotros como árabes, la creación de un estado palestino (...) será aceptado en la región como un socio regional normal", ha asegurado.
Fuentes consultadas por Reuters apuntan a que Israel enviará una delegación comercial a Bahréin, pero ningún cargo de Gobierno. Tampoco la Casa Blanca ha confirmado el nivel de representación que tendrá Israel. Igualmente podrían participar Egipto, Jordania y Marruecos.