MADRID, 26 DE ABRIL (EDIZIONES)
Nusrat Perveen ha pedido este lunes el perdón al presidente de Pakistán para su hijo Abdul Basit, quien se encuentra en el corredor de la muerte y podría ser ejecutado en breve pese a estar parapléjico, según informa Associated Press.
Basit, de 43 años, se encuentra en el corredor de la muerte desde 2009, tras ser condenado por asesinato, y contrajo una meningitis en la cárcel en 2010 que le dejó parapléjico y postrado en una silla de ruedas.
Según Nusrat Perveen, el presidente Mamnun Hussain ordenó el pasado mes de enero parar la ejecución de Abdul Basit unas horas antes de que se le ahorcara. Ahora, esa orden de paralización de la ejecución ha expirado y se ha abierto un nuevo proceso para su ejecución.
La condena a muerte ya se pospuso en dos ocasiones anteriores: una en septiembre de 2015, porque los funcionarios penitenciarios no estaban seguros de cómo colgar a una persona sin tener un pie de apoyo, y otra en noviembre de ese mismo año.
El Tribunal Supremo de Pakistán dijo que la ejecución de Basit debe realizarse acorde a las normas penitenciarias que rigen los procedimientos de ejecución del país, pero estas normas no establecen ninguna disposición para el ahorcamiento de presos en silla de ruedas.
Muchos activistas contrarios a la pena de muerte, como Maya Foa, directora de la ONG Reprieve, han expresado su indignación ante esta ejecución, y argumentan que el riesgo de que la ejecución salga mal al ahorcar a una persona en silla de ruedas es muy grande, pudiendo llevar a una lenta estrangulación e incluso a la decapitación del condenado.