BRUSELAS, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
La canciller alemana, Angela Merkel, ha defendido este jueves que la Unión Europea reduzca las ayudas a la preadhesión para Turquía por la situación preocupante de los derechos fundamentales en el país.
"Defenderé una reducción de los fondos de preadhesión", ha asegurado Merkel en declaraciones a la prensa a su llegada a la cumbre europea, donde discutirán las relaciones con Ankara durante la cena, junto con la crisis norcorena y el acuerdo nuclear iraní tras la decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de no certificar su validez.
Merkel ha justificado esta petición tras advertir que "los acontecimientos en Turquía, en términos de nuestros valores democráticos, han sido muy negativos". "No sólo hay (periodistas y activistas) alemanes detenidos, sino que todo el Estado de Derecho en Turquía está avanzando en la dirección equivocada. Estamos preocupados por esto", ha dicho.
Fuentes europeas no descarta que haya una reducción de las ayudas de preadhesión a Turquía y que se redirijan más para apoyar a la sociedad civil y la democracia, aunque hay países como Italia que rechazan de plano cortar completamente las ayudas a Italia, según fuentes diplomáticas.
Más de un tercio de los 4.450 millones de euros previstos para Turquía entre 2014 y 2020 en ayudas a la preadhesión se centran en reformas específicas para facilitar su entrada al bloque, en especial los sectores de la democracia, los derechos Humanos y derechos fundamentales y el apoyo a la sociedad civil. Hasta ahora, se han desembolsado 258,4 millones de euros a Turquía y se han contratado 368,3 millones.
Eso sí, Merkel ha dejado claro que Turquía está haciendo "un gran trabajo respecto a los refugiados" y los europeos deben cumplir la ayuda prometida. "Hemos prometido 3.000 millones de euros en los próximos tres años, además de los 3.000 millones que ya hemos comprometido. Tenemos que cumplir esta promesa", ha explicado, aunque una fuente de alto nivel europea ha avanzado que la ayuda adicional prometida no se discutirá hasta el año que viene.
Los líderes europeos no prevén dar ningún paso drástico para cortar las negociaciones de adhesión con Turquía, una posición que sólo ha defendido abiertamente Austria y que "ni siquiera Alemania ha apoyado" desde que Merkel avanzó en campaña electoral que quería consultar a sus socios esta posibilidad.
"La mayoría de Estados miembro estiman que la congelación 'de facto' (que hay en las negociaciones de adhesión) refleja bien la situación y que no es cuestión de descongelar. Pero no se ganaría mucho yendo más allá que constatar lo que ya es 'de facto'", ha explicado una fuente diplomática de alto nivel.
Eso sí, "no hay ningún apetito" para avanzar en la mejora de la Unión Aduanera entre la UE y Turquía --que Ankara ve prioritario-- hasta que no haya una mejora en el terreno de los Derechos Humanos.
IRÁN Y COREA DEL NORTE
Se espera que los líderes europeos cierren filas y subrayen "su pleno compromiso" con el acuerdo nuclear iraní tras la decisión de Trump de no certificarlo y dejar en manos del Congreso la decisión de reimponer sanciones o no a Irán.
También pedirán a Corea del Norte, según el borrador de conclusiones, cumplir "plena e incondicionalmente, sin dilación" con sus compromisos con la ONU y avisarán a Pyongyang que considerarán "más respuestas" en "estrecha" consultación con sus socios tras el refuerzo unilateral de las sanciones de la UE por su comportamiento "inaceptable" y que plantea "una amenaza significativa" para la Península coreana y más allá.
