PHNOM PENH 4 Feb. (Reuters/EP) -
Miles de camboyanos se han reunido en la capital, Phnom Penh, para rendir el último homenaje al ex rey Norodom Sihanouk, una figura quijotesca y muy querida que luchó para conseguir la independencia del país y asistir a su cremación.
Multitud de personas se han congregado desde medianoche en la capital para asistir a la cremación del ex monarca, quien murió el pasado 15 de octubre a los 89 años aquejado de una insuficiencia cardíaca. El cuerpo de Sihanouk yacía en un ataúd de oro en el Palacio Real a la espera de su cremación, que ha tenido lugar este lunes, a pesar de que los rituales funerarios empezaron el pasado viernes.
"Este es el momento más triste", ha declarado uno de los asistentes. "Cuando el rey murió, la gente estaba muy triste. Incluso aunque vivamos muy lejos hemos decidido venir para ofrecerle un último homenaje", ha añadido.
"Ayudó mucho al país", ha señalado otro de los manifestantes de la provincia de Kratie (este). "Nos había transmitido un mensaje de unidad y recalcado que no tenemos que luchar los unos contra los otros para vivir", ha agregado.
Más de 400 presos fueron amnistiados para celebrar la ocasión y ver cómo se arrojan al río Mekong las cenizas del ex monarca. El primer ministro de Francia, Jean Marc Ayrault; su homólogo tailandés, Yingluck Shinawatra; y vietnamita, Nguyen Tan Dung; tienen previsto asistir al acto.
SU REINADO
Shihanouk llegó al trono del país asiático en 1941 y reinó durante 60 años de turbulencias políticas hasta 2004, cuando decidió abdicar a favor de su hijo, Norodom Sihamoni, el actual rey camboyano, debido a sus problemas de salud.
En la década de los cincuenta, Sihanouk vio a Camboya independizarse de Francia, en 1953. Después de abdicar, intentó que el país permaneciese neutral durante la Guerra Fría y no pudo evitar que Camboya se implicase en la Guerra de Vietnam apoyando a los vietnamitas frente a los americanos.
Sin embargo, su decisión más controvertida fue el pacto con el régimen comunista de los Jemeres Rojos de Pol Pot --responsable de la muerte de al menos un millón y medio de personas entre 1975 y 1979-- por la que tuvo que pagar un precio elevado. Sihanouk permaneció varios años en arresto domiciliario y pasó 13 años exiliado a causa de la guerra civil que siguió a la caída de dicho régimen.
Su hijo, Norodom Sihamoni, fue coronado rey y goza de un papel principalmente ceremonial con mucho menos poder que el primer ministro, Hun Sen, el "hombre fuerte" de la política camboyana desde hace 27 años.