ROMA, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Justicia italiana, Annamaria Cancellieri, ha vuelto a ser acusada de utilizar su influencia para excarcelar a Giulia Ligresti, hija de un magnate de seguros con cuya familia la ministra tiene una gran amistad, tras la publicación en los medios de comunicación italianos de más llamadas telefónicas de las que la ministra reconoció ante el Senado y la Cámara de Diputados.
Sin embargo, el primer ministro ha vuelto a mostrar su respaldo en la ministra y le ha otorgado su confianza, según ha informado el diario italiano 'La Stampa'.
Cancellieri reconoció el pasado 5 de noviembre ante las dos cámaras del Parlamento haber recibido una llamada de Antonio Ligresti, tío de la joven Giulia Ligresti, debido a la relación de amistad que une a ambas familias. Sin embargo aseguró que no había utilizado su influencia como titular de la cartera de Justicia para facilitar su excarcelación, que se produjo poco después bajo la justificación de que la presa estaba gravemente enferma.
Frente a su versión, los medios de comunicación italianos han publicado durante esta semana la existencia de numerosas llamadas de teléfono entre la ministra, su marido, Sebastiano Peluso, y Antonio Ligresti. Entre el 17 de julio y el 21 de agosto la ministra llamó en tres ocasiones a los familiares de Giulia Ligresti. Además entre el 17 de julio y la primera semana de agosto, días decisivos sobre la decisión de la permanencia en prisión de la joven, el marido de Cancellieri llamó hasta seis veces a Antonio Ligresti.
La publicación de estos datos ha vuelto a poner en duda la continuidad de Cancellieri como titular de justicia, tanto por parte de los medios de comunicación como por varios sectores políticos. "El argumento de la llamada de solidaridad humana a una familia de viejos amigos ha caído en desgracia, ya no se sostiene. La solidaridad se transmite una vez, no nueve en un mes", ha afirmado el diario italiano 'La Repubblica'.
La ministra de Justicia aseguró en su comparecencia ante el Senado y la Cámara de Diputados que estaba dispuesta a dimitir si no obtenía el pleno respaldo del Ejecutivo. Pero tanto el Partido Democrático (PD) del primer ministro, Enrico Letta, como su compañero de coalición, el Pueblo de la Libertad (PDL) del ex primer ministro Silvio Berlusconi, apoyaron a Cancellieri y defendieron su inocencia.
MOCIÓN DE CENSURA
La ministra de Justicia ha insistido mediante una carta abierta en su inocencia. "No he mentido, ni a los magistrados ni al Parlamento", ha asegurado en la misiva, en la que aclara algunos matices sobre las llamadas aunque no contempla la posibilidad de dimitir. Sin embargo, el Movimiento 5 Estrellas ha presentado una moción de censura contra Cancellieri que se votará el próximo 20 de octubre.
Mientras, el PD está dividido entre la opción de que la ministra dimita y esperar a la reunión que mantendrá con Letta próximamente. El alcalde de Florencia, Matteo Renzi, ha afirmado que "Cancellieri debe dimitir". Por su parte el candidato a la secretaría del partido Gianni Cuperlo ha afirmado que en su opinión Letta y la ministra deberían "comprobar" si "todavía se dan las condiciones" para que Cancellieri ocupe la cartera de Justicia.