MAIDUGURI (NIGERIA), 31 Jul. (Reuters/EP) -
Al menos 23 personas han muerto en las últimas horas en el curso de nuevos enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad nigerianas y las milicias del grupo armado islámico Boko Haram en el Estado de Borno (norte de Nigeria), después de que el líder predicador de la secta, Mohamed Yusuf, muriera anoche por un disparo de bala cuando se encontraba bajo custodia policial. Las autoridades aseguran que la muerte se produjo durante un intento de fuga, pero Human Rights Watch ha denunciado el "descarado desprecio de la Policía nigeriana al Estado de derecho".
Yusuf, de 39 años, cuya secta aboga por la implantación de la 'sharia' (ley islámica) en el país, murió anoche en la comisaría de Policía de la ciudad de Maiduguri, capital del Estado. Cientos de personas, en su mayoría supuestos miembros del grupo islámico, han muerto desde el domingo en al menos cuatro Estados del norte en el curso de los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad.
Un reportero de Reuters constató este viernes al menos la presencia de 23 cadáveres ensangrentados aparentemente con heridas de bala en el exterior de la comisaría. Entre ellos figura un antiguo comisario para asuntos religiosos supuestamente partidario de Boko Haram, Alhaji Buji Fai. "Alhaji Buji Fai murió esta mañana junto a otros miembros de Boko Haram durante un tiroteo en la carretera entre Benishek y Maiduguri", declaró un portavoz de la Policía de Maiduguri, Isa Azare.
Yusuf había sido visto por varios periodistas locales, incluido un reportero de Reuters, en un cuartel del Ejército en Maiduguri antes de su captura. No se le apreciaban heridas cuando era trasladado a la comisaría, donde falleció posteriormente. Las autoridades aseguraron que murió por un disparo cuando intentaba escapar. El investigador de Human Rights Watch para Nigeria, Eric Guttschuss, afirmó que la muerte de Yusuf es "un asombroso ejemplo del descarado desprecio de la Policía nigeriana al Estado de derecho".
Los partidarios de Yusuf, armados con machetes, cuchillos, fusiles de caza de fabricación casera y cócteles molotov, han atacado varios Estados del norte de Nigeria en los últimos días, en especial iglesias, comisarías de Policía, cárceles y edificios oficiales. Los enfrentamientos comenzaron el domingo, cuando varios miembros de Boko Haram (conocidos como los talibán nigerianos y cuyo nombre significa 'La educación occidental es pecado') fueron detenidos en el Estado de Bauchi bajo la sospecha de estar planeando el ataque a una comisaría de Policía.
