KATMANDU, 23 Ene. (EP/AP) -
El Gobierno de Nepal levantó el arresto domiciliario impuesto sobre tres disidentes para impedir la celebración de manifestaciones contra el Gobierno mientras ataques perpetrados por rebeldes comunistas dejaron 26 muertos en el sur del país.
Al menos 17 rebeldes, cinco soldados, dos civiles y un policía, murieron en enfrentamientos este domingo en el pueblo de Phapar BAdi, unos 160 kilómetros al sur de la capital, Katmandú. Presuntos rebeldes atacaron a fuerzas de seguridad que patrullaban la zona durante la noche en un enfrentamiento que duró hasta primera hora del domingo, informó el portavoz del Ministerio de Defensa, Bhupendra Poudel.
Las tropas que vigilaban las casas del ex primer ministro, Girija Prasad Koirala, el presidente del Partido Congresista Nepalés, Jadga Prasad Oli, y el miembro del Partido Comunista, Narayan Man Bijuchche, finalizaron su arresto de fin de semana decretado para evitar la celebración de manifestaciones contra el control absoluto al que desde hace un año el rey Gyanendra mantiene sumido al país.
"La Policía se fue esta tarde y ahora creo que soy libre para salir", indicó Oli. Los tres líderes de la oposición se encuentran entre los cinco a los que se decretó el arresto domiciliario el viernes cuando el Gobierno impuso un toque de queda para evitar las manifestaciones en Katmandú. A pesar de que la masiva protesta programada para el viernes no llegó a producirse, la policía arrestó a cientos de activistas que se manifestaron en las calles el sábado. Cerca de 50 personas resultaron heridas en los enfrentamientos entre los activistas y la policía.
Fuentes cercanas a Koirala y Bijuchche confirmaron su puesta en libertad el domingo. Sin embargo, dos de los compañeros de partido de Oli, Madhav Nepal y Bharat Mohan Adhikari, continúan bajo arresto domiciliario.
