Netanyahu mantendrá presión para que se impongan 'líneas rojas' a Irán

Benjamin Netanyahu
REUTERS
Actualizado: jueves, 13 septiembre 2012 11:19


JERUSALÉN, 13 Sep. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha apuntado este miércoles que seguirá intentando que se impongan 'líneas rojas' al programa nuclear iraní a pesar de que Estados Unidos se ha mostrado en contra de esta opción ya que, a su juicio, se trata de una de sus funciones.

"Nos enfrentamos a grandes desafíos. Como primer ministro de Israel es mi función defender los intereses vitales del país y asegurar su seguridad y su futuro", ha argumentado. "El mayor interés a día de hoy es evitar que Irán, un país que pide nuestra destrucción y pretende conseguirla, continúe con sus avances hacia las armas nucleares", ha agregado.

En este sentido, ha dicho que seguirá defendiendo los intereses nacionales de Israel, aunque sabe que no es una tarea fácil. "El liderazgo es puesto a prueba, pero hay que mantenerse aunque haya desacuerdos con los amigos, incluso con los mejores amigos. Esto es lo que he hecho y esto es lo que seguiré haciendo por Israel y por la seguridad de sus ciudadanos", ha puntualizado.

El lunes, el Gobierno de Estados Unidos reiteró que no permitirá que Irán se haga con el control de armas nucleares, aunque matizó que no establecerá 'líneas rojas' o plazos en el marco de conversaciones diplomáticas sobre el asunto.

El martes salió a la luz que la Casa Blanca había rechazado la propuesta de Israel de que Netanyahu se reuniera con el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, durante la conferencia de Naciones Unidas que se celebrará a finales del mes de septiembre en la sede de la organización internacional, en Nueva York, lo que fue visto como una reacción ante la postura israelí respecto al programa nuclear iraní.

Sin embargo, horas después Obama y Netanyahu hablaron por teléfono y reiteraron su compromiso para evitar que Irán se haga con armas nucleares. Ambos líderes reiteraron su unión "en su determinación para evitar que Irán consiga armamento nuclear y han acordado seguir con sus continuas consultas sobre este asunto", según informó la Casa Blanca en un comunicado.

Estados Unidos y la Unión Europea han aplicado duras sanciones contra Irán, incluido un embargo de su petróleo, en un esfuerzo por persuadir a Teherán para que abandone su programa nuclear, que, según sospechan, está destinado a fabricar armas atómicas. Sin embargo, Irán ha rechazado estas acusaciones y ha aseverado en reiteradas ocasiones que el programa nuclear tiene únicamente fines civiles pacíficos y que se enmarca dentro del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP).

El TNP, del que Irán es parte, establece entre otras cosas que, para evitar la proliferación, los países que ya cuentan con energía nuclear han de facilitarla a los países que no la tienen en caso de que estos decidan utilizar esta energía para fines pacíficos.

El martes, Netanyahu intensificó sus amenazas de ataque contra Irán, argumentando que si las potencias mundiales se niegan a fijar "líneas rojas" al programa nuclear iraní entonces no pueden pedir a Israel que no ataque.

Israel, que no es país firmante del TNP, mantiene una política de "opacidad nuclear" y nunca ha reconocido ni desmentido poseer armamento nuclear, aunque el ex técnico nuclear Mordekai Vanunu reveló detalles del programa nuclear israelí a la prensa británica en 1986. A día de hoy, las estimaciones apuntan a que Tel Aviv posee entre 75 y 400 ojivas nucleares y que tiene la capacidad de lanzarlas por medio de aviones, submarinos o misiles balísticos intercontinentales.

Teherán ha manifestado en varias ocasiones que un ataque militar israelí contra sus instalaciones sería una violación flagrante del TNP y debería provocar la respuesta de los miembros firmantes del tratado. Además, ha apuntado que cualquier ataque justificado por su programa nuclear sería una agresión injustificada, ya que el TNP defiende el derecho de los países a desarrollar energía nuclear para fines pacíficos.