MADRID 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las principales ONG que operan en España están llamando a la sociedad a movilizarse para proporcionar una respuesta rápida a las millones de personas damnificadas por el paso del super tifón Haiyan en Filipinas, que azotó el país el pasado viernes y ha tenido un impacto devastador sobre sus 36 provincias, declaradas oficialmente este lunes en estado de calamidad.
Aunque el balance oficial de víctimas mortales se mantiene en 255, fuentes policiales temen que haya hasta 10.000 muertos solo en la provincia de Leyte, donde alrededor del 80 por ciento de los edificios han quedado arrasados. Las ONG se están movilizando sobre el terreno, aunque se enfrentan a enormes dificultades de acceso en las zonas más afectadas, muchas de las cuales permanecen incomunicadas.
Desde España, la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECID) ha fletado un vuelo este lunes cargado con ayuda de emergencia, principalmente enseres de agua y saneamiento, como kits de higiene personal o potabilizadoras de agua, con apoyo de Acción contra el Hambre y Cruz Roja. Durante la madrugada se fletará un segundo vuelo con más ayuda de emergencia, conforme ha anunciado el secretario de Estado de Cooperación, Gonzalo Robles.
Acción contra el Hambre, que trabaja en Filipinas desde el año 2000 tiene ya movilizados a sus equipos sobre el terreno distribuyendo ayuda de emergencia y ha difundido tres números de cuenta bancaria donde los ciudadanos pueden realizar sus aportaciones disponibles en su página web (http://www.accioncontraelhambre.org).
En cuanto a Cruz Roja, cuya sección filipina cuenta con 700.000 voluntarios, su delegado en Manila, Roger Alonso, advierte de que la ayuda humanitaria debe centrarse "en primera instancia, en cubrir las necesidades de la gente que ha perdido su hogar" y con él, todos sus enseres. La institución recoge donaciones a través de su página web o en el teléfono 902 22 22 92.
Oxfam también está ya movilizada. Según informe su filial española, Oxfam Intermón, se han enviado equipos de expertos a Bohol para evaluar las condiciones del agua, la salud pública y el saneamiento, y a Visayas Oriental. La entidad calcula que al menos 4 millones de personas y 905.353 familias se han visto afectadas, pero advierte de que el recuento puede ser más elevado porque son muchas las zonas aún incomunicadas.
"Estos desastres sólo hacen que agravar las duras condiciones de vida en las que viven las personas más pobres de Filipinas. Los agricultores a pequeña escala y aquellos que dependen de la pesca para ganarse la vida son los más afectados. Los campos donde trabajan y sus embarcaciones y aparejos están muy dañados y necesitarán asistencia, no solo hoy, si no durante los meses venideros", la portavoz de Oxfam en Filipinas, Marie Madamba-Nuñez. La organización recoge donativos en el teléfono 902 330 331 y mediante transferencia bancaria (http://www.oxfamintermon.org/).
UNICEF, por su parte, ha puesto el foco en los cerca de dos millones de niños que viven en la región más afectada por el paso del tifón. Según avanzó el representante de la sección filipina de este fondo de Naciones Unidas, Tomoo Hozumi, la prioridad es "conseguir medicamentos básicos, suministros nutricionales, agua potable y artículos de higiene para los niños y las familias".
"Este no es el primer desastre natural que ha azotado Filipinas recientemente, ya que hace tres semanas tuvo lugar un terremoto en Bohol, por lo que sabemos lo importante que es llegar a los niños rápidamente", señaló Hozumi, quien avanzó que los equipos de UNICEF se han movilizado y la agencia "está preparada junto a otras ONG aliadas para encabezar los trabajos de apoyo a los niños". Se pueden realizar donativos en la web www.unicef.es.
Otro ejemplo de entidad que ya está trabajando en la respuesta es World Vision, que tiene un equipo de 500 personas en la zona y que ha hecho llegar este lunes un avión a Manila con 5.000 mantas y 3.000 carpas de plástico, entre otros materiales, para llegar a al menos 240.000 familias en las próximas horas en las provincias de Bohol, Samar y Leyte, así como en la isla de Panay. "Cada minuto cuenta", dice la organización.
CÁRITAS Y MANOS UNIDAS, TAMBIÉN EN LA ZONA
Cáritas, por su parte, ha aprobado el envío urgente de 200.000 euros a Cáritas Filipinas-NASSA para auxiliar a las víctimas del supertifón, donde la planificación de emergencia "ya está en marcha". En concreto, se ha activado la alerta en las 96 diócesis de todo el país y, en colaboración con la red internacional presente en el archipiélago, se está desplegando personal de emergencia en algunas de las zonas más afectadas para evaluar los daños e identificar los sectores de población que necesitan asistencia más urgente.
Por su parte, Manos Unidas, que lleva 25 años en el país, ha abierto una cuenta en el Banco Santander (0049-1892-63-2210525246) para poder trasladar más apoyo a sus contrapartes en Filipinas y, en concreto, a la organización BCDI (Bicol Consortium for Development Initiatives), con la que trabaja desde hace cinco años y que está presente en Camarines Norte y Sur y Masbate, zonas habitualmente afectadas por desastres naturales donde también ha incidido el tifón.
"Las operaciones más inmediatas de auxilio a las víctimas del tifón lo estamos realizando a través de uno de sus socios estratégicos: el consorcio BCDI, con quien tenemos una trayectoria muy consolidada de trabajo en diversos sectores, entre ellos la prevención y reducción de la vulnerabilidad ante el impacto de desastres naturales", explica la Responsable de Proyectos de Cooperación de Manos Unidas en Sudeste Asiático, Patricia Garrido.
Otro ejemplo de entidad que ya está trabajando en la respuesta es World Vision, que tiene un equipo de 500 personas en la zona y que ha hecho llegar este lunes un avión a Manila con 5.000 mantas y 3.000 carpas de plástico, entre otros materiales, para llegar a al menos 240.000 familias en las próximas horas en las provincias de Bohol, Samar y Leyte, así como en la isla de Panay. "Cada minuto cuenta", dice la organización.