MADRID, 20 Oct. (EUROPA PRESS) -
Naciones Unidas ha lamentado que el estancamiento de una solución política al conflicto palestino-israelí está "alimentando las tensiones" en Oriente Próximo, por lo que ha pedido un consenso entra ambas partes para hacer frente a "una realidad cada vez más desesperada".
El enviado de la ONU para el proceso de paz en Oriente Próximo, Tor Wennesland, ha alertado ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas de que el conflicto en la zona continúa deteriorándose y sin avances hacia una solución que involucre a ambas naciones.
Así, Wennesland ha criticado que la realidad sobre el terreno está marcada por extremistas y acciones unilaterales de miembros de ambos bandos. "Los civiles israelíes y palestinos están sufriendo y pagando un precio muy alto por la persistencia del conflicto", ha dicho.
Al mismo tiempo el enviado de la ONU ha apuntado que los asentamientos, los desalojos, la incautación de propiedades palestinas y las restricciones de movimiento, "alimentan aún más el ciclo de violencia", pues los civiles de Israel siguen muriendo y resultando heridos en los ataques palestinos.
"Reitero que todos los asentamientos son ilegales según el derecho internacional y siguen siendo un obstáculo sustancial para la paz", ha aseverado Wennesland.
Además, junto al conflicto político y social, los territorios palestinos se enfrentan a una complicada coyuntura económica pues los gastos superan los ingresos y el apoyo de los donantes, mientras que sus opciones de préstamos bancarios están "agotadas".
"La situación fiscal de la Autoridad Palestina está llegando a un punto de ruptura", ha expresado Wennesland, quien ha explicado que las estimaciones apuntan aun déficit presupuestario de casi 800 millones de dólares --casi 690 millones de euros--.
Esta crisis financiera, que "está ocurriendo simultáneamente en Cisjordania y Gaza" ha puesto de manifiesto la necesidad de adoptar "reformas significativas y cambios de política, tanto por partes de israelíes como de palestinos". Aunque la ONU ya ha lanzado esfuerzo para la reconstrucción de hasta 1.800 viviendas y Egipto ha comenzado a reparar las carreteras costeras de Gaza.
Finalmente, Wennesland ha remarcado que la solución al conflicto no puede darse "por partes" y ha instado a ambas autoridades a que ambos aportes "un paquete más amplio de pasos paralelos" pues se debe "comenzar a restaurar la esperanza de una resolución pacífica, sostenible y negociada del conflicto".
"Debemos construir consensos para el compromiso o enfrentar una realidad cada vez más desesperada", ha zanjado Wennesland.
