La oposición decide reanudar las "protestas callejeras pacíficas" tras la convocatoria de elecciones

MADRID 15 Abr. (EUROPA PRESS) -

Los principales partidos de la oposición de Guinea han decidido reanudar las "protestas callejeras pacíficas" el próximo jueves y organizar "un día del pueblo fantasma" el viernes en la capital guineana, Conakry, y en otras ciudades del interior del país, después de que este domingo el presidente de Guinea, Alpha Condé, anunciase la convocatoria de elecciones legislativas para el próximo día 30 de junio.

En una reunión de emergencia para examinar la situación política del país, los líderes de la Asociación de Partidos para la Finalización de la Transición, la Alianza Democrática Progresista (ADP), el Club de Republicanos (CDR) y el Frente Unido para la Democracia y el Progreso (FDP) han rechazado el anuncio de la fecha de los próximos comicios; una decisión que el presidente guineano ha tomado "unilateralmente", sin consultar con ninguna otra agrupación política.

El portavoz de la oposición, Aboubacar Sylla, ha declarado que la decisión de Condé niega completamente el diálogo con otros grupos, lo que supone toda una provocación para la clase política. "Creemos que la iniciativa llevada a cabo por el presidente compromete seriamente el diálogo político que había comenzado entre el Gobierno y la clase política", ha asegurado Sylla, actual presidente del partido Fuerzas Unidas para el Cambio (UFC), según ha informado este lunes la agencia estatal china Xinhua.

Del mismo modo, Sylla ha apuntado que resulta imposible hablar de diálogo con un Gobierno que no respeta su propia legislación y viola la ley electoral del país. El portavoz también ha sugerido que la única razón por la que los representantes de los partidos de la oposición de la Comisión Electoral Nacional Independiente (CENI) no han participado en el proceso de elección de la fecha es que el Gobierno está planeando cometer "fraude electoral".

En un principio, los comicios estaban previstos para 2011 pero fueron pospuestos de forma repetida debido a un desacuerdo entre el Gobierno guineano y la oposición. Las elecciones tienen por objetivo completar la transición hacia un gobierno civil tras el golpe de Estado de 2008 y desbloquear miles de millones de euros en ayuda europea.

"NO NOS QUEDA OTRA ALTERNATIVA"

La oposición, que acusa a Condé de intentar amañar el voto, ha exigido al Gobierno en reiteradas ocasiones que se le retire el contrato a la empresa sudafricana Waymark, encargada de elaborar y revisar el censo electoral. El Ejecutivo, por su parte, ha asegurado que no hay tiempo suficiente para encontrar una nueva empresa que gestione la lista de votantes y que el sistema de Waymark es seguro contra el fraude.

La oposición ya había advertido con anterioridad de que cualquier decisión unilateral que tomase el Ejecutivo podría empujarles a salir de nuevo a las calles. "Si el Gobierno persiste en esta línea de acción, no nos queda otra alternativa salvo la de tomar las calles", señaló este domingo el antiguo primer ministro del país Sidia Touré, que quedó tercero en las elecciones presidenciales de 2010 y que ahora es uno de los líderes de la oposición.

A finales de febrero, nuevo personas murieron y otras 300 resultaron heridas como consecuencia de dos semanas de enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad guineanas y manifestantes de la oposición que solicitaban al Gobierno que aceptara sus demandas.