MADRID 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
Amnistía Internacional (AI) ha pedido a las autoridades israelíes que garanticen atención la médica adecuada al preso palestino Sarma al Issawi, quien lleva cerca de siete meses en huelga de hambre con algunas breves interrupciones, o que le pongan en libertad para que pueda recibir el tratamiento urgente que necesita.
Al Issawi forma parte del grupo de 1.027 prisioneros palestinos que fueron liberados por Israel en octubre de 2011 a cambio de la entrega del soldado Gilad Shalit, capturado en junio de 2006 por miembros de las Brigadas Al Qassam --brazo armado de Hamás-- y de los Comités de Resistencia Popular.
Sin embargo, Al Issawi fue detenido en julio de 2012, al igual que otros trece palestinos, y fue condenado a finales de enero a ocho meses de cárcel, a contar desde su última detención. Por esas mismas fechas, el palestino dejó de tomar vitaminas y amenazó con dejar de beber agua. Según AI, su salud se ha deteriorado rápidamente, apenas pesa 47 kilos --casi la mitad de su peso habitual-- y su vida corre peligro.
Según la organización, desde que fue detenido en julio de 2012, fue privado del acceso a su abogado durante 23 días y trasladado posteriormente a la prisión de Nafha, en pleno desierto del Néguev.
"Las autoridades israelíes alegan, sin especificar cómo, que ha incumplido las condiciones con que fue puesto en libertad, en el marco de un canje de prisioneros, en octubre de 2011", ha indicado AI. En agosto de 2012, un comité militar israelí se negó a explicarle con detalle, a él o a su abogado, las razones aducidas para su detención, razón por la cual Al Issawi comenzó una huelga de hambre que dura ya más de siete meses.
En un procedimiento paralelo, según Amnistía, un tribunal civil ha presentado cargos contra Samer al Issawi por entrar en el territorio ocupado de Cisjordania. En diciembre de 2012 se celebró una vista para examinar los cargos y Al Issawi entró en la sala en silla de rueda y escoltado por fuerzas especiales de la Policía.
"Cuando intentó en la sala saludar a su madre y a su hermana, fue agredido por los agentes de la Policía, que lo golpearon en el cuello, el pecho y el estómago", ha denunciado la organización.
Ese mismo día, a mediodía, el Ejército israelí irrumpió en casa de la familia Al Issawi y se llevó detenida a su hermana, a la que dejaron en libertad al cabo de 24 horas tras el pago de una fianza y la pusieron bajo arresto domiciliario durante diez días. Según AI, "le han prohibido visitar a su hermano durante seis meses".
DETENCIÓN ADMINISTRATIVA
Amnistía ha recordado que otros presos palestinos, como Jafar Izz al Din y Tareq Qadan, sometidos a detención administrativa, llevan en huelga de hambre desde el 28 de noviembre de 2012 como protesta por su reclusión sin cargos ni juicio.
La detención administrativa es un régimen de detención sin cargos por periodos renovables, y aunque los medios de comunicación han informado de que Israel había accedido a que no se renovaran las órdenes de detención administrativa si no se presentaban evidencias de Inteligencia nuevas y significativas, las autoridades israelíes han seguido dictando y renovando estas órdenes y a finales de 2012 había 178 personas sometidas a detención administrativa.
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha expresado su preocupación por el "rápido deterioro" del estado de salud de los presos palestinos en huelga de hambre y ha instado a Israel a "respetar plenamente" los derechos de los reclusos palestinos. Asimismo, ha reclamado que los presos en régimen de detención administrativa sean imputados y juzgados con garantías o, en caso contrario, puestos inmediatamente en libertad.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, y el secretario general de la Liga Árabe, Nabil Elarabi, han escrito recientemente a Ban para manifestar su preocupación por este conflicto sobre los presos. El secretario general de Naciones Unidas también trató este tema durante una conversación telefónica con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.