GINEBRA, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), pidió hoy, a través de un comunicado, que se tomen medidas políticas urgentes para paliar el grave deterioro de la situación humanitaria en los territorios palestinos ocupados.
La jefa de Actividades Operacionales del CICR para Oriente Próximo y África del norte, Béatrice Mégevand Roggo, hizo su petición de colaboración a los países donantes, con la vista puesta en la conferencia que se celebrará en París la próxima semana. Para mejorar la situación en Gaza y Cisjordania, Roggo cree insuficiente "la sola asistencia humanitaria" y aseguró que "no debe reemplazar a la actividad política".
El CICR se mostró especialmente preocupado por los efectos que tienen las severas restricciones a la circulación de personas y mercancías, que afectan a todos los aspectos de la vida.
Por un lado, la Franja de Gaza se ha ido cerrando al exterior desde junio, reduciéndose las importaciones al mínimo esencial; la infraestructura, en particular los centros médicos, agua y saneamiento, está cada vez en condiciones más precarias. A todo esto se suman los importantes cortes en el suministro de combustible. En Cisjordania, las duras restricciones a la circulación de personas siguen constituyendo un grave obstáculo a la vida económica y social de la población palestina.
Además de sus peticiones a los países donantes, Roggo instó a Tel Aviv a que respete las obligaciones contraídas en virtud del derecho internacional humanitario, reduzca las restricciones a la circulación en la franja de Gaza y Cisjordania y ponga fin a las represalias que paralizan la vida en Gaza. También hace un llamamiento a las facciones palestinas para que dejen de atacar zonas pobladas y no pongan en peligro a las personas civiles.
La representante del CICR se quejó de que las medidas impuestas por Israel apenas "dejan el margen justo para la supervivencia y no permiten llevar una vida normal y digna". El pueblo palestino, manifestó "se ha convertido en rehén del conflicto" y afirmó que "está pagando un precio demasiado alto por las constantes hostilidades entre Israel y facciones palestinas".
Por último, Mégevand Roggo declaró que "el derecho legítimo de Israel de garantizar su seguridad no puede atentar contra el derecho de los palestinos de llevar una vida normal y digna".
