O.Próximo.- Fayad dice que los palestinos necesitan una ayuda de 5.600 millones de euros para los próximos 3 años

Actualizado: lunes, 10 diciembre 2007 19:08

La CE insta a Israel "a cumplir todos sus compromisos hechos antes y después de Annapolis"

BRUSELAS, 10 Dic. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro palestino, Salam Fayad, cifró hoy en 5.600 millones de dólares la asistencia que los territorios palestinos necesitan durante los próximos 3 años para revivir su economía y construir las instituciones necesarias para crear un Estado palestino independiente.

Fayad se reunió en Bruselas con la comisaria de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner, y con los jefes de la diplomacia de los Veintisiete, y les presentó el Plan de Acción para el Desarrollo y Reforma de las Instituciones palestinas para el periodo 2008-2013. "Necesitamos instituciones fuertes y competentes que formen el núcleo del Estado que buscamos tener", afirmó.

Este plan, junto con las necesidades financieras de los palestinos, se presentará a la Conferencia de Donantes que se celebra en París el próximo lunes. El primer ministro palestino dijo que espera que esta reunión sirva para "que se tome en consideración" la "visión de los palestinos" y agradeció de antemano "el apoyo político y financiero de la Unión Europea y de Europa" a lo largo de los últimos años.

Por su parte, Ferrero-Waldner no adelantó la ayuda que la UE comprometerá el próximo lunes y pidió a los países árabes que también aporten fondos a los palestinos. "Siempre hemos tenido un compromiso importante y lo seguiremos teniendo pero esperamos un mayor compromiso de otros países, incluidos los vecinos árabes", apostilló.

El jefe del Ejecutivo palestino dijo que es "urgente" que Israel retire los puestos de control que bloquean el acceso a los territorios palestinos y, muy especialmente, los de la Franja de Gaza, donde "no están provocando nada más que miseria" entre su población. En el mismo sentido se expresó la comisaria de Relaciones Exteriores, que reclamó "reducir los puestos de control" que impiden el acceso y libre movimiento de los palestinos en su territorio.

CESE DE LOS ASENTAMIENTOS

Fayad exigió además el cese "inmediato" de la construcción de nuevos asentamientos israelíes en los territorios palestinos o su expansión porque, a su juicio, son "incoherentes con la letra y el espíritu de (la conferencia de) Annapolis". Esta conferencia se celebró los pasados 26, 27 y 28 de noviembre y en ella israelíes y palestinos se comprometieron a llegar a un acuerdo de paz a finales de 2008.

Por su parte, Ferrero-Walder instó al Ejecutivo de Tel Aviv "a cumplir con los compromisos hechos antes y después de Annapolis" y "evitar cualquier acción que pueda cuestionar el proceso de construcción de la confianza entre las partes".

La comisaria recordó que "Estados Unidos y la ONU han solicitado explicaciones al Gobierno israelí sobre los permisos de construcción (de asentamientos) en Har Homa, Jabal o Homein", una postura que, según dijo, coincide con la de la UE. "Hay que ver cómo paralizarlos, tal y como se prometió", agregó.

Aseguró que la Unión Europea está determinada a "apoyar y acompañar de forma muy activa a las partes en este proceso de negociación" que, por otra parte, reconoció "no será fácil" y en el que "pueden darse retrasos". "Queremos un proceso de paz exitoso que dé como resultado un Estado democrático palestino que viva en paz y seguridad al lado del israelí", añadió la comisaria.

Sobre el estado de las relaciones entre Al Fatá, partido de Abbas en el Gobierno, y el partido islamista Hamás --cuyo líder Jaled Meshal viajó este lunes a Riad para abordar con las autoridades saudíes la necesidad de estrechar un diálogo entre ambas formaciones rivales palestinas--, el primer ministro palestino aseguró que su Ejecutivo busca "una fase de negociación" con el Movimiento de Resistencia Islámica.

Para ello, dijo, hace falta "que se cumplan ciertos requisitos" como "garantizar que lo que pasó en Gaza (el pasado junio cuando Hamás desbancó del poder a Al Fatá en dicho territorio) no vuelva a ocurrir" y el reconocimiento por parte de Hamás de que "el Estado y las instituciones son los responsables de garantizar las necesidades de la población en Gaza y Cisjordania".