JERUSALÉN 5 Ene. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro del Gobierno del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) en Gaza, Ismail Haniyeh, ha telefoneado este viernes al presidente de la Autoridad Palestina y líder de Al Fatá, Mahmud Abbas, para felicitarle por el 48 aniversario de la fundación del movimiento.
Durante la conversación, Haniyeh ha reiterado que Hamás considera de gran importancia la existencia de diversidad política y ha subrayado que la formación trabaja de cara a la consecución de la reconciliación entre ambas facciones, según ha informado la agencia palestina de noticias Maan.
En respuesta, Abbas ha agradecido a Haniyeh el permiso otorgado a Al Fatá para celebrar su aniversario en el enclave, algo que no ocurría desde que Hamás se hiciese con el control de este territorio en 2007, al tiempo que ha expresado su deseo de iniciar una nueva fase de cooperación y buenas relaciones.
El movimiento islamista controla la Franja desde ese año tras su victoria en las elecciones legislativas de 2006, a las que se presentó en medio de presiones internacionales para que abandonara las armas y optara por la vía democrática.
Sin embargo, la victoria de la formación islamista en los comicios, valorados como justos por lo observadores electorales internacionales, provocó que la comunidad internacional cortara sus ayudas a las autoridades palestinas.
Esto abocó a Al Fatá y a Hamás a unos enfrentamientos que finalizaron con la separación territorial y administrativa de Cisjordania y la Franja de Gaza. Desde entonces, Al Fatá controla Cisjordania --a pesar de no haberse hecho con la victoria en las elecciones-- y Hamás está al frente de la Franja.
Abbas no ha estado presente en estos actos festivos, que han congregado a varios cientos de miles de personas, pero se ha dirigido a la multitud desde Ramala con un discurso basado en sus habituales reivindicaciones. "Pronto lograremos la unidad y terminaremos con la ocupación, alzando la bandera palestina sobre la mezquita de Al Aqsa y Jerusalén", ha declarado.
Según Abbas, los palestinos tienen "los ojos puestos en Jerusalén", ciudad que Israel reivindica como propia en su totalidad. En este sentido, ha llamado a "aprovechar la oportunidad" para "salvar" la "capital" palestina, en alusión a la parte este de Jerusalén.
A principios de diciembre, Al Fatá permitió a Hamás que celebrara su aniversario en Cisjordania en un gesto de acercamiento entre ambas facciones rivales, hecho que tuvo lugar apenas unas semanas después del fin de la operación militar aérea israelí contra el enclave palestino.