JERUSALÉN, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las Instituciones Penitenciarias de Israel tomaron hoy la decisión de separar a los presos palestinos pertenecientes a Hamás y Al Fatá, después de que los servicios de Inteligencia advirtieran de la posibilidad de que los enfrentamientos entre ambas facciones se trasladaran también a las cárceles israelíes que acogen a presos palestinos de ambos bandos.
Según informa el diario israelí 'Haaretz', es la primera vez que las autoridades carcelarias en Israel separan a los presos en un plazo de tiempo tan exiguo sin que se hayan registrado con anterioridad incidentes violentos dentro de las células.
A primera hora de esta mañana, alrededor de 1.200 palestinos presos, afiliados a Al Fatá, fueron separados de 800 de sus correligionarios de Hamás en la cárcel de Ketziot, mientras que 900 agentes de seguridad presos, la mitad de ellos pertenecientes a Al Fatá, fueron segregados de los internos de Hamás en la cárcel de Ofer. Las autoridades hebreas han reforzado el contingente de agentes de seguridad que vigilan ambas prisiones en un intento por impedir el desarrollo de cualquier incidente violento en su interior.
