OTAN.- Los aliados certificarán en la cumbre de Chicago la capacidad operativa inicial del escudo antimisiles

Actualizado: sábado, 19 mayo 2012 11:09

Darán luz verde a "una cultura de cooperación renovada" para desarrollar capacidades militares en un contexto de crisis y recortes en defensa


BRUSELAS, 19 May. (EUROPA PRESS) -

Los jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN certificarán este próximo domingo 20 de mayo, durante el primer día de la cumbre de Chicago, la capacidad operativa inicial de su sistema de defensa antimisiles dentro de un paquete de más de 20 proyectos multinacionales que aprobarán para desarrollar de forma conjunta las capacidades militares fundamentales para garantizar la seguridad de los aliados en el futuro y como forma de sortear los recortes generalizados en defensa por la crisis.

El Gobierno estadounidense de Barack Obama ha instado a los aliados europeos a hacer más por su seguridad tras dejar clara su intención de reducir su peso militar en Europa para centrarse más en Asia-Pacífico, el nuevo centro de poder geoestratégico emergente, y ha expresado su deseo de que hagan más para suplir capacidades de abastecimiento en vuelo, de inteligencia, vigilancia y reconocimiento y bombas inteligentes, que fueron clave para la operación en Libia.

El secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, espera que los aliados europeos reequilibren su peso en el seno de la OTAN de aquí a 2020, para lo que necesariamente deben colaborar para desarrollar capacidades conjuntas en un contexto de crisis y comprometerse con "una nueva cultura de cooperación renovada". "Necesitamos una relación transaltántica reequilibrada", ha reconocido en el pasado.

El escudo antimisiles es uno de los más de 20 proyectos logísticos y de desarrollo de capacidades conjuntas, de mantenimiento de las capacidades existentes o de entrenamiento que los aliados promoverán en el marco de la 'Defensa Inteligente' propuesta por Anders Fogh Rasmussen para "hacer más con menos" en el contexto de crisis.

El sistema, que debe estar plenamente operativo en 2018 o 2020 y estará bajo mando de la OTAN desde el primer momento, comenzará a funcionar con un buque de guerra y un satélite que aportará Estados Unidos y un radar interceptor de misiles estadounidense que acogerá Turquía, aunque Alemania ha ofrecido aportar "varios misiles Patriot", según fuentes aliadas.

Muy criticado por Rusia, que teme que su capacidad de disuasión se vea minada por el sistema aliado, éste permitirá hacer frente a la amenaza "creciente y real" de ataques balísticos de países procedentes de países como Irán o Corea del Norte y será dirigido desde el cuartel general aliado de Rammstein (Alemania).

España se ha ofrecido a Washington para acoger a partir de 2014 cuatro destructores estadounidenses dotados del sistema AEGIS capaz de interceptar misiles en la base naval de Rota (Cádiz), pero no aportará fragatas F-100, equipadas con el mismo sistema.

Otros aliados como Rumanía y Polonia acogerán misiles interceptores de Estados Unidos, Países Bajos actualizará cuatro sistemas de radares propios para el escudo y Francia podría aportar varios satélites más adelante para el sistema.

SISTEMA DE VIGILANCIA CON AVIONES ESPÍA

Junto con el escudo antimisiles, los aliados acordarán también avanzar en el sistema de vigilancia terrestre de la OTAN (AGS) que se pondrá en marcha entre 2015 y 2017 a partir de cinco aviones no tripulados 'Global Hawk Block 40' que adquirirán 13 países aliados --Estados Unidos, Alemania, Italia, Luxemburgo, Bulgaria, Rumanía, República Checa, Estonia, Letonia, Lituania, Eslovenia, Eslovaquia y Noruega-- para reforzar las capacidades de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, después de que en la operación en Libia se demostrara la falta de capacidades en este área, especialmente entre los europeos.

El AGS --que se apoyará en radares avanzados para detectar y rastrear de forma constante objetos en movimiento y permitirá a los comandantes aliados contar con imágenes en tiempo real de lo que ocurre sobre un terreno de gran extensión, día y noche, con independencia de las condiciones meteorológicas y se complementará con los AWACS de la OTAN-- tendrá un coste estimado de más de 3.000 millones de euros, incluido el coste de funcionamiento y mantenimiento durante los próximos 20 años. Su base principal operativa estará en Sigonella (Italia), que recibirá el primer 'drone' en 2015.

Además, los países individuales podrán conectar sus sistemas de vigilancia nacional al sistema de la OTAN para "intercambiar" las imágenes. Francia y Reino Unido aportarán sus sistemas Heron TP y Sentinel.

España, que participará en los dos proyectos estrella de la Alianza como son el escudo antimisiles y el sistema de vigilancia terrestre, podría sumarse a "10 o 12 proyectos de la OTAN" en total, según fuentes aliadas.

Cada país asumirá el liderazgo en un proyecto, en el que participará un grupo de países reducido. Dinamarca se ha ofrecido por ejemplo a liderar un proyecto para adquirir y gestionar reservas de bombas y municiones inteligentes, los países del grupo de Visegrad --Hungría, Polonia, República Checa y Eslovaquia-- han acordado poner en marcha un grupo de combate conjunto de 3.000 efectivos para 2016, mientras que República Checa liderará además otro para mejorar las capacidades de defensa frente ataques con armas químicas, biológicas, radiológicas y nucleares.

Los jefes aliados aprobaron en la cumbre de Lisboa, de noviembre de 2010, un nuevo Concepto Estratégico para la Alianza y una transformación profunda del organismo de defensa euroatlántico para garantizar que es "más ágil" y "menos costoso" a la hora de realizar sus misiones en el futuro, así como revisar la Postura de Defensa y Disuasión de la Alianza. En Chicago, se espera que acuerden mantener "el equilibrio actual" de sus fuerzas convencionales y nucleares.

Tras discutir las capacidades militares, los jefes continuarán sus discusiones durante una cena de trabajo el domingo. Sus ministros de Exteriores mantendrán una cena en paralelo centrada en cómo reforzar la relación entre los aliados y socios terceros para contribuir a la seguridad mundial y a la que también asistirá la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton. Los ministros de Defensa aliados cenarán por separado para continuar las discusiones sobre las capacidades militares necesarias para el futuro.

AFGANISTÁN Y REUNIONES CON TERCEROS

Al día siguiente, los 50 países que contribuyen a la operación de la OTAN en Afganistán discutirán las próximas etapas del relevo para que las fuerzas afganas asuman de forma plena la responsabilidad de la seguridad en todo el país a finales de 2014, junto al presidente afgano, Hamid Karzai, y el secretario general de la ONU. En total, participan más de 60 países y organismos internacionales en la sesión, incluidos los cinco países de Asia Central que deben facilitar el repliegue de las tropas internacionales, además de Pakistán, Rusia y Japón.

Los jefes de Estado y de Gobierno mantendrá una reunión posterior con sus homólogos de otros 13 países que han realizado hasta ahora una notable aportación en términos militares, económico o político a las operaciones de la OTAN. Se trata de Marruecos, Jordania, Qatar, Emiratos Árabes Unidos, Australia, Nueva Zelanda, Japón, Corea del Sur, Austria, Finlandia, Suiza y Suecia.

Por su parte, los jefes de la diplomacia aliados discutirán con Macedonia, Bosnia y Herzegovina, Montenegro y Georgia --potenciales candidato a la adhesión-- sobre los principales puntos de la agenda de la cumbre.