QUETTA (PAKISTÁN), 12 Jun. (EP/AP) -
Cinco milicianos tribales armados murieron y once resultaron heridos ayer durante el tiroteo que se produjo después de que asaltasen un puesto militar de seguridad en una carretera de la provincia de Baluchistán (suroeste), según informaron hoy fuentes oficiales.
El ataque fue llevado a cabo por dos decenas de milicianos contra un puesto de seguridad próximo a Sangsila, una aldea situada a350 kilómetros al suroeste de la capital de Baluchistán, Quetta, según el portavoz del Gobierno provincial, Abdur Raziq Bugti. En el ataque no resultó herido ningún soldado y el puesto de seguridad no sufrió daños, añadió.
Bugti atribuyó el asalto a renegados de la tribu Bugti, que en estos últimos años han perpetrado otros ataques contra las fuerzas de seguridad y contra plantas de producción de gas y gaseoductos. Según las autoridades, con estos ataques pretenden conseguir más beneficios de los recursos extraídos en sus territorios.
