ISLAMABAD 1 Ago. (EP/AP) -
El presidente paquistaní, el general Pervez Musharraf, aceptó hoy públicamente la sentencia que revocó su decisión de suspender al presidente del Tribunal Supremo, Iftikhar Mohammed Chaudhry, alegando que quiere mantener unos vínculos armoniosos con Chaudhry.
Musharraf sufrió duras críticas cuando el 9 de marzo presentó una acusación contra el presidente del Tribunal Supremo por abusar supuestamente de su cargo para conseguir un trabajo muy lucrativo para su hijo y grandes beneficios para sí mismo.
El general, un aliado clave de Estados Unidos en su guerra contra el terrorismo, se enfrentó a la crisis política más grave de su Gobierno el 20 de julio cuando el Tribunal Supremo reinstauró a Chaudhry haciendo caso a las protestas de los abogados y de la oposición que acusaron al presidente de pretender deshacerse de un juez independiente antes de intentar conseguir una nueva legislatura de cinco años como jefe de Estado.
"Acepto la sentencia de la magistratura y la honro", dijo Musharraf en un discurso televisado ayer, según publicó la agencia de noticias estatal Associated Press de Pakistán. Aun así, la agencia publicó que el presidente defendió su acción contra Chaudhry porque lo había hecho para cumplir con un requerimiento constitucional.
"Tenemos vínculos muy familiares y espero que se mantengan igual de armoniosos en el futuro", comentó en relación a Chaudhry y añadió que la independencia judicial es "esencial para el funcionamiento de un Gobierno". Chaudhry, que retomó sus funciones poco después de que el Supremo declarase ilegal la orden de suspensión de Musharraf, no ha hecho aún ningún comentario.