ISLAMABAD, 25 Ene. (EP/AP) -
Pakistán ha ampliado la variedad de delitos por los que se puede recibir la pena capital, pese a que el endurecimiento de la ley no ha logrado detener el crimen, y actualmente tiene a 7.400 personas en el corredor de la muerte a la espera de que se cumpla la sentencia, informó hoy la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán.
La directora de la comisión, Asma Jehangir, pidió urgentemente la abolición de la pena de muerte en el país, alegando que el sistema legal paquistaní está corrupto y no puede garantizar juicios justos para los sentenciados, según expresó durante la presentación de un nuevo informe sobre la pena de muerte en Pakistán, en el que ha colaborado también la Federación Internacional de Derechos Humanos.
A lo largo de los años, los Gobierno en Pakistán han ido aumentando el número de crímenes castigables con pena de muerte, en lugar de atajar las causas profundas de la violencia y el crimen, dijo Jehangir.
"Cuando la ley y el orden se deteriore, el Gobierno o el Estado, en lugar de resolver los problemas, su único eslogan se convierte en que todo será castigado con perna de muerte", dijo la directora en la rueda de prensa celebrada en Islamabad. "Esto no es una disuasión del crimen", constató.
El informe establece que desnudar a una mujer o dañar las propiedades del sistema de ferrocarriles son algunos de los crímenes que pueden ser castigados con la muerte. Otros son asesinato, insultar al Islam o a su libro sagrado, el Corán, tráfico de armas o drogas, traición y secuestro.
Pakistán está entre los países como más convictos en el corredor de la muerte, con7.400, según el documento. En 2006 se ejecutaron unas 60 personas, comparadas con las 54 de 2005. Las ejecuciones se llevan a cabo por ahorcamiento y la mayoría de los presos esperan en el corredor de la muerte durante años. Jehangir acusó al Estado de cometiendo "un asesinato" si ejecuta a cualquiera sin asegurarle un juicio justo.
