Una paquistaní de 18 años sobrevive a un "crimen de honor"

Actualizado: jueves, 5 junio 2014 17:39

LAHORE, (PAKISTÁN), 5 Jun. (Reuters/EP) -

Una chica paquistaní de 18 años ha sobrevivido después de que su familia la tiroteara y la arrojara a un canal por casarse con el hombre al que quería, según ha confirmado la Policía.

Un portavoz de la Policía local, Ali Akbar, ha explicado que el padre, el tío, la tía y el hermano de la chica, Saba Maqsood, le dispararon y después la arrojaron a un canal en la ciudad de Hafizabad, en la región de Punjab. Akbar ha asegurado que se trata de "un incidente relacionado con asuntos de honor".

Según la Policía, "la víctima, Saba, se casó con su vecino Muhammad Qaiser por amor hace cinco días. Su familia la llevó a Hafizabad, le dispararon dos veces y la tiraron al canal metida en un saco, pensando que estaba muerta".

Maqsood, que mostraba heridas en la mejilla y en la mano derecha, recobró la consciencia unos minutos después de que su familia la tirara al agua y logró llegar hasta la orilla, donde la ayudaron dos personas. "Es una chica muy valiente. Salió del canal y se acercó hasta una estación de servicio cercana desde donde un equipo de rescate la llevó de urgencia al hospital", ha añadido Akbar.

El portavoz de la Policía ha grabado un comunicado de Maqsood en el que culpa a su familia por el ataque. "Fui torturada y disparada por mi padre, Maqsood Ahmad; mi hermano, Faisal Maqsood; mi tío, Ashfaq Ahmad y su mujer, Sajida Bibi", dice Maqsood en la grabación.

La Policía ha asegurado que la chica "está fuera de peligro". Las autoridades, en nombre de la víctima, han puesto una denuncia contra la familia. Los agentes han ido a casa del padre, en la ciudad cercana de Gujranwala, pero cuando han llegado todos los sospechosos habían desaparecido.

CRÍMENES DE HONOR

Muchas familias conservadoras de Pakistán consideran un deshonor que una mujer se enamore y elija a su propio marido. En algunas zonas de este país, en el que 180 millones de habitantes son musulmanes, son las familias quienes eligen a los maridos de las chicas y estas no pueden oponerse a los matrimonios concertados; de lo contrario, puede acabar en un "crimen de honor".

El mes pasado una mujer paquistaní llamada Farzana Iqbal fue atacada y asesinada, supuestamente, por algunos miembros de su familia por casarse con quien ella quiso. El caso centró la atención internacional, incluida la condena de Naciones Unidas, en parte porque ocurrió a plena luz del día en Lahore, la capital cultural de Pakistán.

Sin embargo, otros incidentes no salen a la luz. En 2013, los medios publicaron 869 casos como este, según la Comisión de Derechos Humanos de Pakistán, pero la cifra real es mucho más alta.