Plan International aplaude la prohibición de la mutilación genital femenina en Sierra Leona

Práctica De La Mutilación Genital Femenina En Uganda
REUTERS - Archivo
Publicado: lunes, 28 enero 2019 14:07

MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -

La organización no gubernamental Plan International ha aplaudido este lunes la decisión del Gobierno de Sierra Leona de prohibir "con efecto inmediato" la mutilación genital femenina como parte de una serie de medidas contra las ceremonias de iniciación por parte de sociedades secretas.

"Tres millones de niñas y jóvenes son mutiladas cada año en todo el mundo, pese a estar prohibido por ley o decreto constitucional en la mayoría de los países con mayor prevalencia", ha dicho la directora general de la ONG, Concha López.

"Desde Plan International celebramos la prohibición en Sierra Leona, pero pedimos a la comunidad internacional mayores esfuerzos para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y acabar con la MGF para 2030", ha agregado.

Plan International ha recordado que la ablación supone "una grave violación de los derechos que acarrea traumas y provoca lesiones físicas de por vida", al tiempo que ha resaltado que "sigue siendo una tradición muy arraigada" pese a que en 2016 la Unión Africana (UA) prohibió esta práctica.

Con cerca de un 90 por ciento de niñas y mujeres que han sufrido ablación, Sierra Leona tiene una de las mayores tasas de mutilación genital femenina en África, según datos de Naciones Unidas, y es uno de los pocos países del continente en el que aún era legal.

El anuncio fue realizado el viernes por el ministro de Gobierno Local y Desarrollo Rural, Anthony Brewah, quien resaltó en una carta enviada a las autoridades regionales que "el Gobierno ha prohibido con efecto inmediato la iniciación en todo el país".

La ablación es parte del proceso de iniciación en sociedades secretas conocidas como 'Bondo', que tienen un destacado peso político. Brewah dijo que la prohibición es una respuesta a la violencia política relacionada con estas sociedades secretas, si bien confirmó además que se aplica a las iniciaciones de mujeres en las mismas.

La activista y exministra Rugiatu Turay, quien se reunirá esta semana con Brewah y el titular de la cartera de Bienestar Social, destacó que la decisión es "un paso en la buena dirección".

"Queremos asegurarnos de que el Gobierno sabe que los cuerpos de la mujer no son campos de batalla. Queremos saber qué harán para proteger a las mujeres y cómo se asegurarán de que la prohibición es aplicada", sostuvo.

La muerte de una niña de diez años a causa de esta práctica en diciembre incrementó los llamamientos a favor de la ilegalización de la ablación.

Turay, fundadora del grupo Amazonian Initiative Movement, resaltó que se debe abordar cómo cambiar la ablación por otros ritos de iniciación. "No queremos erradicar las 'Bondo', es nuestra cultura, pero queremos asegurarnos de que la ablación es eliminada de las prácticas de iniciación", explicó.

MILLONES DE NIÑAS EN RIESGO

Un informe publicado en septiembre de 2018 denunció que millones de niñas en África están en riesgo de mutilación genital femenina debido a que sus gobiernos no aplican las leyes que prohíben esta práctica, condenada internacionalmente.

Un total de seis países, en los que residen 16 millones de niñas --Chad, Liberia, Malí, Sierra Leona, Somalia y Sudán--, ni siquiera han criminalizado la ablación, tal y como recoge el documento sobre leyes en los 28 países en los que esta práctica es endémica.

Los líderes mundiales se han comprometido a poner fin a la práctica, que implica la retirada total o parcial de los genitales externos y que afecta a 200 millones de niñas y mujeres, según los objetivos de desarrollo acordados en 2015.

Los autores del informe calculan que 55 millones de niñas menores de 15 años en África han sido sometidas a la ablación o están en riesgo de serlo. La mitad viven en tres países --Egipto, Etiopía y Nigeria-- que ya han prohibido la práctica.

Asimismo, destacan que únicamente dos países, Kenia y Uganda, tienen una legislación robusta, al tiempo que alertan de que la mayoría de las legislaciones nacionales no hacen frente a la tendencia creciente de que profesionales médicos lleven a cabo la ablación.