Pompeo carga duramente contra China desde El Vaticano por perseguir minorías religiosas

CIUDAD DEL VATICANO, 2 Oct. (Reuters/EP) -

El secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, ha entonado este miércoles uno de sus discursos más duros contra China, en este caso por perseguir a minorías religiosas como los musulmanes uigures, en el marco de su visita oficial a El Vaticano.

"Cuando un Estado se gobierna de forma absoluta, exige a sus ciudadanos que veneren al Gobierno, no a Dios. Por eso China a puesto a más de un millón de uigures en centros de internamiento y por eso ha lanzado a los pastores cristianos a las cárceles", ha denunciado.

"Cuando un Estado se gobierna absolutamente, Dios se convierte en una amenaza a la autoridad", ha añadido durante una conferencia sobre libertad religiosa, en la que ha cargado igualmente contra Cuba, Irán, Pakistán y Birmania.

Pompeo ha considerado que en este contexto se debe dar "otra batalla en defensa de la dignidad humana y la libertad religiosa". "Los estándares están más altos que durante la Segunda Guerra Mundial porque las amenazas son más diversas y más numerosas", ha indicado.

El jefe de la diplomacia estadounidense ya capitaneó, en los márgenes de la 74 Asamblea General de Naciones Unidas, una reunión de un grupo de países para denunciar la persecución a los uigures, si bien entonces reclamó la implicación de más países musulmanes.

Los uigures son una minoría étnica de fe musulmana que se concentra en Xinjiang, en el noroeste de China. Denuncian una discriminación histórica por parte del Gobierno de Pekín y, más recientemente, persecución. Según expertos de la ONU, hay más de un millón recluidos en centros clandestinos.

China ha negado que haya emprendido acciones deliberadas contra los uigures y argumenta que las instalaciones en Xinjiang son en realidad centros de formación de ingreso voluntario dedicados a luchar contra el extremismo.

Pompeo, que este miércoles ha visitado la Capilla Sixtina y otras partes de los Museos Vaticanos, tiene previsto reunirse con el Papa Francisco el jueves por la mañana.