LISBOA, 11 Jul. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
La decisión del Gobierno portugués de crear una tasa especial del 25% sobre las compañías petroleras para combatir la crisis, no tendrá ningún impacto en los resultados netos de Galp Energía, aunque supondrá una anticipación de los impuestos para la petrolera lusa.
El Gobierno aprobó ayer en Consejo de Ministros la creación de una tasa de tributación para las empresas de productos petrolíferos refinados. La tasa del 25% sobre las plusvalías de los stocks de crudo de las petroleras. Es decir, se tributará la valorización de los 'stocks' desde que fueron adquiridos y el final del ejercicio.
Esta tasa es conocida popularmente por "Robín Hood", ya que los beneficios extraordinarios obtenidos por la aplicación de este criterio estarán sujetos a una tasa de tributación autónoma del 25%, que será destinada a sufragar los apoyos sociales.
Para efectos fiscales, la valoración de los 'stocks' de combustibles será realizada a través del método FIFO, o del coste medio ponderado. Sin embargo, como Galp en sus demostraciones financieras ya refleja este método FIFO (el primero en entrar en las reservas es el primero en salir), esta medida del gobierno, "no tiene ningún impacto" al nivel de su resultado líquido, indica la petrolera lusa en comunicado.
Pero, a nivel financiero, dice Galp, el impacto es relevante. "El nuevo criterio de valorimetría de los stocks para efectos fiscales, podrá suponer una anticipación del pago de los impuestos que, a modo de ejemplo, a fechas del 31 de marzo de 2008 correspondería, aproximadamente, a unos 110 millones de euros", afirma la petrolera lusa.
Esta tasa también afectará a Repsol y British Petroleun (BP), aunque ninguna se ha querido pronunciar hasta no conocer afondo la ley.
Los analistas creen que esta tasa "Robin Hood" afectará a las petroleras y a la Comisión Europea, no le agrada mucho esta medida adoptada por el primer ministro, José Sócrates, para combatir la crisis.
En declaraciones a "Semanario Económico", la portavoz de la Comisión Europea para la Fiscalidad, María Assimakopolou, considera que esta medida no es una solución que alivie el precio de los combustibles. Además, aclaró que en estos momentos no hay ninguna discusión en el seno de la Comisión para adoptar esta medida a nivel comunitario.
En opinión de Assimakopolou, la Comisión tiene muchas reservas en relación a la medida, porque "si las compañías petroleras ven aumentar los impuestos sobre sus beneficios, podrían cortar en las inversiones en el área de la extracción o en el desarrollo del negocio de las energías renovables que están actualmente en fase de desenvolvimiento".
