BUCAREST, 13 Dic. (Reuters/EP) -
El presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, y el Partido Social Demócrata (PSD) de Rumanía, vencedor de las recientes elecciones parlamentarias, han evidenciado este martes sus diferencias de cara a las negociaciones para formar un nuevo gobierno después de que el jefe de Estado haya convocado una ronda de consultas.
El PSD ha advertido de que no asistirá a la ronda de contactos. "Hemos tenido una discusión en el partido. No podemos cumplir su invitación para mañana mientras el viejo Parlamento siga vigente", ha dicho el líder socialdemócrata, Liviu Dragnea.
"No podemos plantear una propuesta de primer ministro hasta que el nuevo Parlamento sea validado", ha añadido, en declaraciones a los periodistas.
Iohannis ha deslizado que no aceptará a Dragnea como primer ministro por sus antecedentes penales, a pesar de que el PSD se hizo con el 46 por ciento de los votos en los comicios del pasado Gobierno. El líder socialdemócrata fue condenado por fraude electoral a una pena de dos años.
"Los criterios de integridad para la designación en primer ministro siguen en vigor", ha afirmado el jefe de Estado en declaraciones a los medios. En este sentido, ha recordado que puso estos criterios antes del comienzo de la campaña electoral "para evitar discusiones innecesarias" a posteriori.
El PSD, junto a su aliado ALDE --que logró el 6 por ciento de los sufragios--, podría sumar una cómoda mayoría en el Parlamento. Cabe la posibilidad de que la formación proponga a un candidato alternativo a Dragnea para evitar polémicas.
