MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de República Democrática del Congo (RDC) ha afirmado que la capital de Kivu Sur, Bukavu, que fue anunciada como conquistada por la milicia del Movimiento 23 de Marzo (M23), se encuentra bajo el control del Ejército congoleño y de los grupos de autodefensa congoleños Wazalendo.
"La ciudad de Bukavu (Kivu Sur), invadida brevemente por los terroristas del M23, está controlada por el Ejército congoleño y los valientes wazalendo", ha comunicado la Presidencia congoleña en un comunicado en su cuenta de la red social X.
El presidente de RDC, Félix Tshisekedi, ha examinado "la evolución de las operaciones militares y los desafíos humanitarios en las provincias de Kivu Norte y Kivu Sur".
Durante su participación este sábado en la 61ª Conferencia de Múnich sobre seguridad, el mandatario, según el comunicado, "recibió el apoyo de muchos países miembros de la Unión Europea, que condenaron claramente las acciones criminales de Ruanda en RDC y están trabajando en el establecimiento de sanciones apropiadas contra el régimen del Kigali".
CONTRADICE LO DICHO POR EL M23
Las declaraciones de la Presidencia congoleña contrastan con lo anunciado por el M23, que informó este sábado de su conquista de Bukavu en la culminación de una ofensiva, aseguraron, provocada por el Ejército de RDC y sus "ataques contra la población civil".
Aunque el M23 había asegurado a principios de mes que no tenía intención de atacar la ciudad, la extensión política de la milicia, la Alianza del Río Congo, denunció que los "ataques" del Ejército llevaron a los guerrilleros primero a asumir el control del cercano aeropuerto de Kavumu --que "el Ejército empleaba para lanzar ataques aéreos contra la población", según el grupo-- antes de tomar la ciudad.
Tras su derrota en Kavumu, el Ejército y sus aliados, según aseguraron las milicias, "abandonaron la ciudad de Bukavu después de participar en saqueos y otros abusos".
El grupo rebelde, integrado principalmente por tutsis congoleños, lanzó esta nueva ofensiva a finales de 2022 en la ruptura del frágil acuerdo de paz que puso fin a una etapa previa del conflicto entre 2012 y 2013.
Ruanda es objeto de críticas proporcionar apoyo logístico, material y efectivos al M23. El Gobierno ruandés rechaza estas acusaciones y señala en su lugar a las autoridades congoleñas por reprimir a los tutsis congoleños con apoyo de grupos armados como las Fuerzas Democráticas para la Liberación de Ruanda (FDLR) --fundada por hutus huidos tras el genocidio en Ruanda en 1994-- y otras milicias locales.
UNA CIUDAD PARALIZADA
Fuentes locales han informado a la emisora de Naciones Unidas en el país, Radio Okapi, que los combatientes del M23 siguen paseándose "dispersados por varios barrios de la ciudad".
De hecho, comandantes locales del grupo han instado esta mañana a grupos de residentes que se abstengan de formar concentraciones como mínimo hasta la tarde.
Según las fuentes de Radio Okapi, "la situación ha provocado una paralización de las actividades económicas" y la mayoría de las tiendas y farmacias en barrios como Bagira y Brasserie "han cerrado por miedo a los saqueos".
Además, los residentes han expresado su preocupación ante la gran cantidad de armas que los militares congoleños han dejado abandonadas tras su retirada de la ciudad y temen que caigan "en las manos equivocadas".