RDCongo.- El Ejército congoleño hace un llamamiento a los rebeldes para que se integren en sus filas

Actualizado: viernes, 28 septiembre 2007 20:11

NUEVA YORK, 28 Sep. (EUROPA PRESS) -

El Ejército congoleño ha lanzado un llamamiento a las milicias leales al general renegado Laurent Nkunda, entre otros combatientes y grupos armados de la provincia Kivu Norte de la República Democrática del Congo (RDC), para que se integren en sus filas o se desmovilicen.

"En especial, estoy llamando a las milicias de las Fuerzas Armadas de la RDC", explicó el jefe de las Fuerzas Armadas del país (FARDC), el comandante general Dieudonne Kayembe, en referencia a los hombres de Nkunda, ya que, señaló, "son pagados por las FARDC".

Según la agencia de noticias de la ONU, IRIN, Kayembe explicó que se abrirán cuatro puntos de encuentro para la recepción de las milicias en Sake, situada a 27 kilómetros de Goma, la principal ciudad de la provincia. También se pondrán en marcha otros centros en la zona de Masisi y en el territorio de Rutshuru. Además, se distribuirá comida en estos lugares, que también tendrán un centro de orientación.

Por otra parte, el Ejército congoleño anunció la integración de un grupo de 132 combatientes de Kivu Norte en el centro de orientación de Kamina, en la provincia de Katanga, en el sureste. El subcomandante del Ejército en la provincia, el coronel Delphin Kahindi, explicó que la mayor parte de los que se integraron son hombres que desertaron de las filas de Nkunda, aunque también acudieron guerreros Mai Mai. Kahindi señaló que los miembros de las milicias tienen la opción de integrarse en las FARDC o desmovilizarse y volver a la vida civil.

El llamamiento se produjo mientras se informó del inicio de nuevos combates en la provincia de Kivu Norte entre el Ejército y las fuerzas del general rebelde, después de un alto el fuego de dos semanas negociado por la misión de la ONU en la RDC. Como consecuencia de los combates, al menos 300.000 personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares desde finales de 2006, según las agencias humanitarias.