LONDRES 22 May. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Marta Altuna) -
El ministro del Interior británico, John Reid, quiere que sean las víctimas de los criminales las que decidan si éstos deben salir de la cárcel en libertad provisional. La propuesta del ministro se produce en un momento difícil para su Ministerio, ya que se vio envuelto en la polémica cuando se supo que 1.023 extranjeros fueron puestos en libertad una vez cumplida su condena sin haber considerado su deportación. Reid presentará su plan ante el Consejo de Libertad Provisional para Inglaterra y Gales. En los últimos meses se produjeron en Reino Unido casos polémicos, como el de Anthony Rice, un hombre que pasó tiempo en la cárcel por haber cometido delitos de carácter sexual y que nueve meses después de salir de prisión mató a una mujer. Además, otro convicto, Damien Hanson, asesinó al financiero John Monckton, en noviembre de 2004 después de haber salido de la cárcel.
Algunos expertos criticaron asimismo al Consejo de Libertad Provisional por considerar que se pone por delante la protección de los delincuentes a la protección del público en general.
David Hines, cuya hija fue asesinada, indicó que está satisfecho por el plan de Reid. "Francamente estamos cansados de que se ponga a la gente en libertad y se les permita que maten de nuevo". "Sentimos que debe haber alguien que nos represente", indicó.
No obstante, el responsable de Interior del partido conservador, David Davis, mostró sus reservas sobre este plan. "En sí mismo, creo que puede ser una buena idea", indicó, aunque dijo que no está seguro de que funcione en la práctica. Además, opinó que estos planes del gobierno se deben a que quieren cambiar su mala imagen debido al escándalo sucedido en el asunto de las deportaciones.