Las autoridades rusas advierten de que las amenazas de Pyongyang impiden la reanudación de las conversaciones sobre su programa nuclear
MOSCÚ, 4 Abr. (Reuters/EP) -
El Gobierno de Rusia ha considerado este jueves que las acciones llevadas a cabo por las autoridades norcoreanas son inaceptables pues violan las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que prohíben a Corea del Norte desarrollar y usar tecnología nuclear y de misiles balísticos.
Las autoridades rusas también han señalado que esta situación dificulta enormemente la reanudación de las conversaciones a seis bandas sobre su programa nuclear, iniciadas en 2002 tras la crisis nuclear provocada por Pyongyang. Los países participantes en estas conversaciones son Estados Unidos, Rusia, China, Japón y las dos Coreas.
"Las acciones llevadas a cabo por Corea del Norte complican enormemente las perspectivas de reanudación de las conversaciones a seis bandas", ha declarado un portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Alexander Lukashevich, durante una sesión informativa. "El rechazo del Gobierno norcoreano a las decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU es absolutamente inaceptable", ha añadido Lukashevich.
Pyongyang rechazó formalmente la resolución del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas el pasado 9 de marzo, un día después de haber declarado nulos todos los acuerdos de no agresión suscritos con Corea del Sur. Tras el anuncio, Washington reiteró que estas provocativas acciones abocarían al Gobierno norcoreano al aislamiento internacional.
Según ha informado esta semana la agencia estatal de noticias norcoreana KCNA, el Gobierno tiene intención de reconstruir y reanudar las operaciones en todas las instalaciones nucleares del país, incluido el reactor para el enriquecimiento de uranio de Yongbyon, que estaba apagado desde 2007.
Estos movimientos se enmarcan en la escalada de tensión regional, que comenzó el año pasado, con los lanzamientos de cohetes de largo alcance de abril y diciembre, y que ha continuado en 2013, con la prueba nuclear del pasado 12 de febrero, por parte de Corea del Norte.