Serbia.- La hija de Milosevic califica de "escandaloso" el funeral de su padre "en un patio trasero"

BELGRADO 19 Mar. (EP/AP) -

La hija del ex presidente yugoslavo Slobodan Milosevic calificó el funeral de su padre ayer en Serbia de "escandaloso" y acusó al resto de su familia de haberlo organizado así. Marija, que vive en Montenegro, declaró en una entrevista con AP que ha roto todas sus relaciones con su madre y su hermano, que viven en Moscú.

"Ya no hay razón para tener ningún contacto con mi familia, aseguró Marija Milosevic, de 40 años. "En ningún lugar de nuestro planeta la gente es enterrada en sus patios traseros", lamentó.

Milosevic fue enterrado ayer en el jardín de la casa de su familia en Pozarevac, su ciudad natal, al este de Serbia, después de que unas 80.000 personas le dieran el último adiós en Belgrado. Marija declaró que pedirá la exhumación del cadáver de su padre para que pueda ser enterrado en Montenegro, donde nacieron sus progenitores, que se suicidaron.

El ex presidente murió el sábado 11 de marzo en su celda de la prisión del Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia, en La Haya, donde estaba siendo juzgado por crímenes de guerra y genocidio. Marija, su hijo Marko y la viuda, Mirjana Markovic, no asistieron a su despedida ni en Belgrado y Pozarevac.

La viuda de Milosevic y su hijo organizaron el funeral desde Moscú, donde se encuentran exiliados, ya que tienen pendientes acusaciones criminales en Serbia. No obstante, enviaron cartas que fueron leídas ante la tumba.

Serbia es un "país traidor que le vendió", aseguró hoy Marija, refiriéndose a la detención de su padre en 2001 y a su extradición a La Haya. "Mi padre fue asesinado en La Haya. Era un hombre sano, de una familia sana, podía haber vivido otros 20 años", afirmó.

Marija también tiene pendientes acusaciones en Serbia, por disparar un arma contra un negociador del Gobierno durante la denteción del ex presidente en 2001.

En la entrevista, también acusó a los miembros del Partido Socialista Serbio, asociado a Milesovic, que estuvieron a cargo del féretro los días que permaneció en Belgrado y acudieron al funeral en Pozarevac. "Mi estómago dio un vuelco cuando vi a los enemigos junto al féretro, la misma gente que se alejó de él como ratones el día que fue detenido", señaló.

Entre las 80.000 personas que acudieron ayer a Belgrado y los 20.000 que asistieron al entierro en Pozarevac había radicales locales y llegados desde Rusia. "No les pedimos que vinieran, no son nuestra familia", denunció Marija. "Mi padre era todo para mí, mi gran amor", agregó.