ROMA, 2 Ene. (EUROPA PRESS) -
Al menos siete civiles murieron esta mañana en el centro de Mogadiscio después de que los soldados etíopes empezaran a disparar indiscrinadamente en respuesta a un atentado que su convoy había sufrido minutos y que había causado la muerte de dos militares, según informó la agencia misionera de noticias MISNA.
Fuentes periodísticas locales indicaron que el convoy fue objeto de un atentado en la zona de Maka al Mukarama, donde las tropas etíopes llevaban a cabo labores de rastreo y de Policía. Como en ocasiones anteriores, los soldados reaccionaron abriendo fuego indiscriminadamente a su alrededor, lo que causó la muerte de al menos siete personas, según informaron testigos oculares.
Toda la zona fue acordonada posteriormente por los militares, que empezaron a rastrear la zona y a practicar detenciones, según una de las principales emisoras del país y una de las más importantes fuentes de información sobre temas somalíes, Radio Shabelle.
Los soldados etíopes, que de haberse cumplido los anuncios de su propio Gobierno hubieran debido retirarse de Mogadiscio a finales de 2008, aún no han abandonado sus posiciones en la capital, aunque algunas fuentes creen que podrían hacerlo en los próximos cinco días.
Ayer por la noche se registraron importantes combates en Mogadiscio después de que un grupo de insurgentes atacase a los 'cascos verdes' de la Unión Africana. Los enfrentamientos comenzaron en el sur y se extendieron al centro y causaron, según fuentes locales, al menos ocho muertos y diez heridos.
Entre las víctimas de estos combates figuran varios civiles, según MISNA. Por ejemplo, cuatro personas de una misma familia murieron en el interior de su propia casa por el impacto de un obús de mortero que los insurgentes habían disparado contra la residencia del presidente sin acertar su objetivo.
