Sudán.- El Ministerio de Exteriores sudanés está dispuesto a contestar a algunos de los puntos acordados en Arusha

Actualizado: martes, 7 agosto 2007 22:40

JARTUM, 7 Ago. (EP/AP) -

El Ministerio de Asuntos Exteriores sudanés está dispuesto a responder a algunos de los puntos acordados en una reunión celebrada el pasado fin de semana en la localidad tanzana de Arusha en la que participaron representantes de diversas facciones rebeldes y encaminada a sellar la paz en la conflictiva región sudanesa de Darfur, región donde en 2003 estalló un conflicto armado que ha provocado la muerte de 200.000 personas y ha desplazado de sus hogares a más de 2 millones.

"Sudán está dispuesto a responder parte del contenido de la declaración (de Arusha), particularmente aquellos puntos relacionados con el cese de hostilidades cuando los demás (grupos rebeldes) también lo respeten", explicó a los periodistas el portavoz del Ministerio, Ali al Sadiq, al término de su reunión con el enviado especial de la ONU para Darfur, Jan Eliasson, y un alto funcionario del Ministerio de Exteriores sudanés, Mutrif Siddig, en Jartum.

El Ejecutivo asegura además que deja la puerta abierta para aquellos grupos rebeldes que no participaron en el encuentro puedan sumarse a una próxima ronda de negociaciones, después de que uno de los principales líderes de los grupos guerrilleros --Abdel Wahid Mohammed Nur, uno de los líderes más influyentes de una facción del Movimiento de Liberación de Sudán-- se ausentara de la cita. No obstante, todavía no hay fecha ni lugar fijados para celebrar tal ronda de discusiones, algo que, según el Ejecutivo de Jartum, será determinado en los próximos dos o tres meses.

Los grupos rebeldes que asistieron al encuentro de cuatro días en Tanzania, acordaron mantener negociaciones con el Gobierno sudanés. Por su parte, la Unión Africana y la ONU aseguraron ayer que casi todas las facciones en liza suscribieron una "plataforma común" para abordar cuestiones para compartir el poder o la distribución de la riqueza, así como cuestiones de seguridad, territorio o humanitarias.

Por su parte, Eliasson declaró que el Ejecutivo ha dejado claro que no va a permitir una "renegociación del Acuerdo de Paz de Darfur" y ha puesto de relieve que todos los partidos deben estar implicados en el fin de la violencia en Darfur. Dicho acuerdo de paz fue suscrito en 2006 entre el Gobierno y una facción rebelde y la violencia ha continuado escalando desde entonces, mientras que por su parte los grupos rebeldes se han dividido en subgrupos.

Por otra parte, Siddig explicó que un destacado líder guerrillero que padece problemas abdominales recibirá autorización para salir de Sudán si acepta renunciar a la violencia. Se trata de Suleiman Jamous, de unos 65 años de edad y líder de la facción rebelde Ejército de Liberación de Sudán, que además ha ejercido de vínculo entre rebeldes y las agencias de ayuda humanitaria.

El pasado año fue detenido en el norte de Darfur por milicianos leales a otro líder guerrillero y en la actualidad está siendo tratado en un hospital de la ONU fuera de Darfur. Aunque puede abandonar el centro médico, teme ser arrestado por el Gobierno o sufrir represalias del mismo.

"Si hay garantías de que participará en el proceso de paz y no lleva armas o incita a llevar armas, entonces permitiremos que Naciones Unidas le saque de Kadugli a las aulas de la negociación", aseguró Siddig al Centro de Prensa de Sudán.