MADRID 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
Taiwán ha levantado las sanciones impuestas el pasado mes de mayo a Filipinas a raíz de la muerte de un pescador taiwanés a manos de la Guardia Costera filipina, después de que Manila haya cumplido las condiciones de Taipei.
"A la vista de que el Gobierno filipino ha satisfecho nuestras cuatro demandas, el Gobierno ha decidido levantar, a partir de hoy, todas las sanciones impuestas contra ese país", ha dicho ministro de Exteriores de Taiwán, David Y.L. Lin.
Lin ha explicado que Filipinas ha pedido perdón públicamente, ya que su presidente, Benigno Aquino, ha autorizado al jefe de su Oficina Económica y Cultural, Amadeo R. Pérez, a disculparse con la familia de la víctima y con el pueblo taiwanés.
En segundo lugar, ha revelado que las autoridades filipinas han llegado a un acuerdo con la familia de la víctima para compensarla por la muerte del pescador, de acuerdo con la agencia de noticias oficial de Taiwán, CAN.
En el marco judicial, ha recordado que el Buró Nacional de Investigaciones de Filipinas (BNI) publicó ayer las conclusiones de sus pesquisas, en las que responsabiliza del suceso a ocho miembros de la Guardia Costera.
El canciller taiwanés ha apuntado que, en consecuencia, el Departamento de Justicia de Filipinas se ha comprometido a procesar a estos ocho guardias costeros por cargos de homicidio y, en cuatro casos, por encubrimiento y destrucción de pruebas.
Por último, el jefe de la diplomacia taiwanesa ha anunciado que las autoridades filipinas han accedido a reanudar cuanto antes las conversaciones bilaterales sobre pesca para evitar incidentes similares en el futuro.
EL SUCESO
Los hechos ocurrieron el pasado 9 de mayo, cuando la Guardia Costera filipina disparó contra el pesquero taiwanés 'Guang Ta Hsin 28' en defensa propia --según su versión--, acabando con la vida de Hung Shih Cheng, de 65 años de edad, y dando lugar a un conflicto diplomático.
Las autoridades filipinas argumentaron que el 'Guang Ta Hsin 28' estaba faenando en sus aguas territoriales y que, al recibir el aviso para que saliera de allí, intentó chocar contra las patrulleras. Sin embargo, no había signos de colisión.
En respuesta, Taiwán dio un ultimátum de 72 horas al Gobierno filipino para que pidiera perdón, compensara a la familia de la víctima, investigara el caso y reanudara las conversaciones bilaterales sobre pesca.
Manila cumplió con algunas de las demandas, algo que Taipei consideró insatisfactorio y, una vez expirado el plazo, aprobó un paquete de sanciones con 11 medidas, sobre todo comerciales y migratorias, que han estado vigentes hasta ahora.