ANTAKYA (TURQUÍA), 30 Jul. (Reuters/EP) -
Turquía ha enviado un convoy compuesto por 20 camiones que trasladan vehículos blindados, baterías de misiles y militares hasta la provincia de Kilis, situada en el sureste del país y fronteriza con Siria, según ha informado la prensa turca y varios testigos.
El convoy ha partido de una base de la provincia de Gaziantep hacia Kilis, donde se desplegarán los militares, según ha informado la agencia estatal de noticias Anatolia.
Los testigos han dicho que la fuerza militar ya ha dejado la carretera y se ha desplegado en una zona fronteriza cercada. Las imágenes de televisión difundidas por la agencia de noticias Dogan han mostrado al menos seis vehículos blindados en la cima de una carretera. Autobuses y camiones, probablemente de transporte de personal, también forman parte del convoy.
En los últimos meses, Turquía ha reforzado su despliegue militar a lo largo de los 911 kilómetros de frontera con Siria por el conflicto que vive el país vecino. Desde que los activistas opositores comenzaron su revuelta contra el régimen que lidera Bashar al Assad, a mediados de marzo de 2012, la represión de las fuerzas gubernamentales y la respuesta de los rebeldes armados ha dejado más de 20.000 muertos.
La provincia de Kilis alberga un importante centro de refugiados sirios que han huido de la violencia que registra su país. Alrededor de 44.000 refugiados se encuentran en Turquía.
El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, advirtió la semana pasada de que miembros del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), un grupo extremista armado que ha lanzado ataques dentro de Turquía, están aprovechando la situación para situarse en la frontera de Siria con Turquía.
Kilis tiene una mayoría de población kurda y no se ha visto afectada por la violencia que registran las regiones vecinas de Siria. Sin embargo, el Gobierno de Turquía está preocupado porque el PKK ejerza una influencia en esa zona y ponga en riesgo la seguridad de Turquía.
El PKK ha llevado a cabo una campaña de lucha por la autonomía de la del sureste de Turquía desde hace más de 20 años y su enfrentamiento con las fuerzas de seguridad del Gobierno ha acabado con más de 40.000 muertos, en su mayoría kurdos.
