Turquía.- Tres periodistas de 'Agos', la revista de Dink, comparecen hoy ante la Justicia por violar el artículo 301

Actualizado: miércoles, 18 julio 2007 11:06

ESTAMBUL (TURQUIA), 18 Jul. (del corresponsal de EUROPA PRESS, Ildefonso González) -

Tres periodistas de la revista turca 'Agos', de la que era director el reportero Hrant Dink asesinado a tiros el pasado enero, comparecen hoy ante un tribunal de Estambul acusados de violar el polémico artículo 301 del Código Penal y de insultar a la Justicia.

Los tres profesionales podrían ser condenados a penas de entre seis meses y tres años de cárcel si son hallados culpables por el Tribunal Penal de Sisli, en Estambul. El propietario del semanario, Serkis Seropyan; y el redactor jefe e hijo de Hrant Dink, Arat Dink, están acusados de "insultos a la turquidad" (identidad turca), un delito por el que decenas de periodistas e intelectuales pasan al año por los tribunales turcos. Mientras, el cronista Aydin Engin deberá responder por "insultos al tribunal".

En este sentido, la organización de defensa de la libertad de prensa Reporteros sin Fronteras (RsF) ha condenado el proceso judicial contra los tres informadores. "No tenemos más remedio que denunciar este proceso, y sobre todo la utilización del artículo 301, que representa una grave amenaza para la libertad de expresión. Hacemos un llamamiento a los jueces para que dicten una sentencia acorde con los valores de la democracia y del Estado de Derecho", señaló esta semana en un comunicado.

Las manifestaciones en que se basa la acusación fueron pronunciadas por Hrant Dink en una entrevista concedida hace un año a la agencia Reuters. En ella se refería a la memoria colectiva armenia, marcada por el genocidio de 1915. A Aydin Engin se le juzga por una crónica titulada "Hay que tocar a la justicia", publicada el 14 de octubre de 2005, en la que criticaba con dureza la incompetencia de la Justicia, en el marco de los procesos abiertos a 'Agos'.

El pasado 14 de junio, Aydin Engin, Arat Dink y Serkis Seropyan fueron declarados inocentes de "intentar influir en la justicia", un cargo que se les imputaba sobre la base de esa misma crónica.