ANKARA, 4 Ago. (EP/AP) -
Un total de 21 diputados kurdos apoyados por un partido que ha sido acusado de tener vínculos con el grupo rebelde Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) juraron su cargo el sábado para entrar a formar parte del nuevo Parlamento turco.
Es la primera vez que este grupo obtiene representación en la Asamblea Legislativa desde su expulsión, en 1994, por los presuntos vínculos con los rebeldes kurdos.
Para muchos kurdos, el resurgimiento del Partido de la Sociedad Democrática supone el advenimiento de un nuevo periodo en su lucha para conseguir más derechos. Pero, al mismo tiempo, muchos turcos desconfían de un partido sospechoso de estar influenciado por el PKK --al que Estados Unidos y la Unión Europea consideran como un grupo terrorista. El PKK pretende establecer un Estado kurdo independiente de Turquía.
El Parlamento, formado por 550 miembros, estará dominado por el partido islámico del primer ministro turco, Recep Tayip Erdogan, que triunfó en las pasadas elecciones del 22 de julio. Sin embargo, la diferencia es que ahora los kurdos tendrán una plataforma para reivindicar sus derechos.
