KIEV 17 Jul. (EP/AP) -
El descarrilamiento y posterior incendio hoy de un tren de carga que transportaba fósforo amarillo líquido en Ucrania ha provocado una nube tóxica de 90 kilómetros cuadrados que amenaza a 14 pueblos de la región de Lviv, situada en el oeste del país. Las autoridades han evacuado ya a más de 800 personas y otras 20 han tenido que ser hospitalizadas por intoxicación.
El portavoz del Ministerio de Defensa, Ihor Halyavinsky, explicó que las vidas de las personas intoxicadas no corren peligro, y las autoridades indicaron después que seis de ellos habían sido dados de alta. No obstante, algunos medios de comunicación aseguraban que decenas de personas de la misma zona tuvieron que recibir asistencia médica por mareos y vómitos.
Asimismo, el portavoz del Ministerio de Emergencias, Ihor Krol, afirmó que "la nueve de gas tóxico se ha dispersado y no existe amenaza para la vida de la población".
El tren, que completaba una ruta entre Kazajistán y Polonia, descarriló cerca de la ciudad Lviv, cerca de la frontera polaca, y 15 de sus 58 vagones volcaron, explicó Krol. Seis de ellos se incendiaron y la nube tóxica se expandió por 90 kilómetros cuadrados.
El fósforo amarillo líquido es una sustancia venenosa muy inflamable que se usa principalmente para fabricar fertilizantes, aunque también se utiliza para producir pesticidas, productos de limpieza y explosivos. Esta sustancia puede incendiarse espontáneamente en contacto con aire a temperaturas superiores a los 40 grados centígrados.
Tras el descarrilamiento del tren, las autoridades locales indicaron a los residentes, unos 11.000, que permanecieran en sus hogares, que no bebieran agua de los pozos, no comieran hortalizas de sus jardines o tomaran la leche de sus vacas.