KIEV, 3 Ago. (EP/AP) -
El presidente ucraniano, Viktor Yushchenko, firmó hoy un acuerdo con el futuro primer ministro, Viktor Yanukovych, para asegurar que sus políticas prooccidentales puedan llevarse a cabo cuando este viernes el líder prorruso sea nombrado jefe de Gobierno.
El portavoz parlamentario, Alexander Moroz, explicó que la fecha del nombramiento del primer ministro se ha pospuesto al viernes para poder formar una nueva coalición, en la que el partido de Yushchenko, 'Nuestra Ucrania', podría estar incluido.
La firma de un acuerdo sobre el programa de Gobierno es parte de las condiciones del presidente para apoyar la candidatura de Yanukovych. Los 27 puntos del acuerdo incluyen el intento de incorporar a Ucrania a la UE, la entrada en la Organización Mundial del Comercio y cooperación con la OTAN; también se menciona la posibilidad de unirse a una zona de libre comercio con Rusia, Bielorrusia y Kazajstán. Declara el ucraniano la lengua oficial del país, aunque no en exclusividad, lo que se entiende como un guiño al electorado rusoparlante de Yanukovych.
La formación de Yanukovych, el Partido de las Regiones, ganó el mayor número de escaños en las elecciones parlamentarias de marzo, pero no los suficientes como para gobernar en solitario. Uno de los partidos clave en la 'Revolución Naranja', el Partido Socialista, decidió apoyar a Yanukovych en contra de sus intenciones iniciales, que lo vinculaban a 'Nuestra Ucrania'. La nueva coalición apoya a Yanukovich como primer ministro, el antiguo presidente cuya destitución se hizo efectiva con la 'Revolución Naranja'.
Después de cuatro meses sin un Gobierno efectivo, Yushchenko se encontraba en la disyuntiva de aceptar al candidato prorruso y antiguo rival o de disolver el Parlamento y convocar nuevas elecciones.
Yushchenko anunció anoche a las 2 a.m. (hora local) que aceptaría a Yanukovych como nuevo primer ministro. "No ha sido un camino fácil", dijo Yushchenko. "Se ha hecho un gran progreso, hemos encontrado un compromiso correcto e inteligente".
Yanukovych ha vuelto a la política ucraniana de manera inesperada, después de haber sido expulsado del poder por fraude electoral, en una campaña capitaneada por el actual presidente, Yushchenko. En marzo, y gracias a una intensa campaña electoral en sus antiguos feudos, el este y el sur de Ucrania, consiguió para su partido la mayoría de escaños del Parlamento.
