Reclama un cambio de modelo para dar prioridad a la I+D en lugar de las grandes infraestructuras
BRUSELAS, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea quiere que el Gobierno español dedique a innovación al menos 8.000 millones de euros de los más de 35.000 millones que recibirá de los fondos estructurales comunitarios en 2007-2013. España se beneficiará durante este periodo de un 42% menos de ayudas comunitarias que en la actualidad, y Bruselas quiere que los recortes afecten sólo a inversiones en infraestructuras, pero que al mismo tiempo se dupliquen los fondos destinados a I+D.
El Ejecutivo comunitario y el español se encuentran ahora en plena negociación sobre el marco nacional para gestionar los fondos europeos y sobre el reparto definitivo entre las 17 comunidades autónomas, que todavía no se ha completado. Ambas cosas tienen que estar listas antes de finales de año para que se puedan empezar a presentar proyectos en 2007.
En este diálogo, Bruselas insiste en que las inversiones de las ayudas comunitarias tienen que centrarse en la innovación. "Lo que la Comisión sugiere a las autoridades españolas que tengan una gran ambición para dedicar inversiones a la innovación. La cifra inicial para negociar que proponemos es de entre 6.000 y 8.000 millones de euros", entre los que se incluiría el fondo tecnológico de más de 2.000 millones que se pactó en diciembre de 2005, según explicó un alto funcionario comunitario.
Durante el periodo 2000-2006, España dedicó a innovación sólo 3.600 millones de los fondos estructurales, pese a que la cantidad global recibida asciende a 54.372 millones. "Lo que pedimos es un cambio de enfoque porque es más fácil gastar el dinero para construir una autopista o un tren de alta velocidad. Es mucho más difícil aplicar medidas para fomentar la innovación porque hay que colaborar con otros socios", destacó el alto funcionario.
Los nuevos reglamentos de los fondos estructurales exigen que las regiones más pobres 'Objetivo 1' dediquen al menos el 60% de sus ayudas a cuestiones relacionadas con la estrategia de Lisboa de más crecimiento y más empleo, y las 'Objetivo 2' un 75%. Sin embargo, en el periodo anterior, estas prioridades sólo han recibido el 21% de las subvenciones, mientras que se ha dedicado un 24% a infraestructuras, por lo que España "tendrá que hacer un esfuerzo muy significativo" para cambiar de modelo, según reconoce la Comisión.
Los expertos del Ejecutivo comunitario señalan que las inversiones más rentables son las que más mejoran la productividad, uno de los principales déficits económicos en España. Entre los ejemplos que citaron se encuentran los parques tecnológicos de Boecillo (Castilla y León), Málaga o Zamudio; la red de centros tecnológicos del País Vasco; o las incubadoras de empresa, que han recibido abundantes ayudas europeas. Lo que no hay que hacer es, por ejemplo, financiar infraestructuras de transporte en regiones ricas, aunque sí que se seguirán primando en Andalucía, Galicia o Extremadura.
REPARTO POR OBJETIVOS
Aunque todavía no se ha completado el reparto de fondos por comunidades autónomas, sí que se conoce cuál será el reparto por objetivos. El Fondo de Cohesión, que financia infraestructuras de transporte y proyectos medioambientales, estará dotado para España con 3.543 millones de euros, mientras que el Fondo Tecnológico asciende a 2.248 millones.
Las regiones Objetivo de Convergencia (Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y Galicia) reciben en total 19.479 millones de euros, mientras que para las afectadas por el 'efecto estadístico' (Asturias, Ceuta y Melilla, y Murcia) se han reservado 1.415 millones, a los que hay que añadir una asignación especial para Ceuta y Melilla de 55 millones.
Las comunidades que salen del Objetivo 1 por su propio crecimiento (Canarias, Castilla y León y Comunidad Valenciana) tendrán que repartirse 4.015 millones. Canarias tendrá una doble asignación suplementaria de 112 millones y de 489 millones por tratarse de una región ultraperiférica.
Para el resto de comunidades autónomas (Aragón, Baleares, Cantabria, Cataluña, La Rioja, Madrid, Navarra y País Vasco) quedan sólo 3.297 millones de euros, más 559 millones del Objetivo de Cooperación Territorial.
El Ejecutivo comunitario destaca que España habrá recibido más de 165.000 millones de euros de la política europea de cohesión desde su adhesión en 1986 hasta 2013. Ha sido desde 1988 el principal país receptor, aunque en el próximo periodo le adelantará Polonia. Las ayudas comunitarias de esta política han representado entre el 2% y el 5% del PIB de las autonomías de Objetivo 1 y ligeramente menos del 1% en las de Objetivo 2.
La mayoría de las regiones Objetivo 1 han aumentado durante el periodo 2000-2005 su renta per cápita con respecto al promedio nacional, lo que ha hecho que las diferencias entre autonomías se vayan reduciendo. Las únicas excepciones a esta tendencia son la Comunidad Valenciana (cuya renta per cápita en proporción a la media española cayó del 96,5% en 2000 al 91,5% en 2006), Canarias (94,8% a 90,6%), Murcia (83,9% a 83,1%) y Castilla la Mancha (78,6% a 78,3%).
