NUEVA YORK, 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
La reciente crisis de crédito provocó un endurecimiento de las condiciones de los préstamos y una mayor incertidumbre respecto a la recuperación del mercado de la vivienda, pero sus efectos sobre el resto de los sectores de la economía fueron limitados, según se desprende del informe de la Reserva Federal (Fed) conocido como 'Libro Beige'.
El informe elaborado por los doce bancos estatales estadounidenses señala en su última edición que la actividad económica del país "continúa su expansión" a un ritmo moderado, según afirmaron la mayor parte de las entidades.
No obstante, la Reserva Federal (Fed) anunció que la mayoría de los bancos informaron de que las recientes dificultades en los mercados financieros habían acarreado un endurecimiento en las condiciones crediticias para la compra de viviendas, lo que "ha tenido un efecto notable en la actividad inmobiliaria".
"La reducción del volumen de crédito disponible incrementó la incertidumbre sobre cuando se producirá la recuperación del sector de la vivienda", afirma el documento.
El informe indica que varios bancos hicieron notar que los mercados inmobiliarios comerciales habían experimentado también "unas condiciones de crédito algo más duras". " Sin embargo, cierto número de bancos indicó que la "disponibilidad de crédito y la calidad del mismo se mantuvo adecuada para la mayoría de los prestatarios tanto privados como empresariales".
La gran mayoría de los doce bancos estatales estadounidenses apuntaron que la construcción y el sector inmobiliario residencial continuaron debilitándose, con débiles ventas de viviendas o incluso descensos en la mayoría de las regiones y rebajas de precios de inmuebles o sin variaciones. Asimismo, los inventarios de viviendas sin vender fueron calificados como "elevados" y siete de los doce bancos pronostican que la situación continuará en el corto plazo con potenciales mayores bajadas.
Por otro lado, los bancos informaron de que en la mayoría de los distritos las ventas minoristas fueron "positivas en general", con crecimientos entre "moderados y modestos", aunque numerosos distritos calificaron de "lento" el ritmo de las ventas de automóviles y muebles.
Casi todas las regiones informaron de como mínimo "modestos incrementos" en el empleo, así como en los salarios, aunque nueve de los doce bancos estatales apuntaron escasez de trabajadores especializados.
Respecto a las presiones inflacionistas, la mayoría de los distritos registraron pequeños cambios en los precios. En casi todas las regiones los precios de la vivienda presionaron a la baja, aunque el encarecimiento de los alimentos continuó siendo ampliamente denunciado e incrementando las presiones inflacionistas en supermercados y restaurantes.
