BRUSELAS, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea, Francia, Alemania, Reino Unido, China y Rusia se han comprometido este miércoles a reforzar la relación económica con Irán y han apostado por buscar "soluciones prácticas" para el levantamiento de las sanciones tras constatar su cumplimiento del acuerdo nuclear, tal y como ha verificado la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA).
Altos funcionarios de la UE, Francia, Alemania, Reino Unido, China y Rusia se han reunido en Viena este miércoles en el marco de la comisión que revisa el cumplimiento del pacto nuclear, del que se desmarcado Estados Unidos, que ha reimpuesto sanciones económicas a Irán, cuyo impacto han abordado en la cita.
"El levantamiento de las sanciones que permita la normalización de las relaciones comerciales y económicas con Irán constituyen partes esenciales del JCPOA", como se conoce el acuerdo nuclear, ha recordado el servicio diplomático europeo en un comunicado.
Por ello, los cinco países y la UE han reiterado su compromiso con la aplicación del acuerdo nuclear en su totalidad y han aplaudido que Irán continúe cumpliendo sus compromisos en virtud del pacto a pesar de la reintroducción de las sanciones de Estados Unidos, algo que ha certificado ya la AIEA en 14 informes.
Los cinco países y la UE han abordado las diferentes acciones para tratar de facilitar las transacciones con Irán, incluido el instrumento especial acordado conocido como INSTEX, del que son acreedores Francia, Alemania y Reino Unido, para "facilitar y permitir el comercio legítimo con Irán".
La UE ha confiado en que esté operativo "lo antes posible, en estrecha coordinación con una entidad iraní correspondiente, que está siendo establecida" y trabajará con "países europeos interesados" para ampliarlo y para abrirlo a empresas de terceros países "en una fase posterior".
En todo caso, los cinco países y la UE han reiterado su compromiso de mantener y promover las relaciones económicas con Irán, con mantener las exportaciones de crudo iraní, alentar las inversiones en Irán y proteger a las empresas de las sanciones estadounidense, además de con prestar apoyo práctico para el comercio y la inversión con Irán.
Además, han confirmado que seguirán apoyando la modernización del reactor de Arak para investigación y la conversión de la planta de Fordó en un centro tecnológico y apoyando proyectos de cooperación nuclear civil, al tiempo que han subrayado su disposición de estudiar propuestas para transferencias de bienes duales nucleares a Irán para uso no nuclear.
