BRUSELAS, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
La iniciativa conjunta de la Unión Europea y del Consejo de Europa para declarar el próximo 10 de octubre Día Europeo de lucha contra la pena de muerte, ha tropezado con la negativa de Polonia a elaborar un texto que no recoja también el derecho a la vida y, por lo tanto, bloquea una declaración que no presenta problema alguno para los 26 socios restantes de la UE.
El asunto se trató hoy de manera informal durante el almuerzo que los ministros de Justicia e Interior celebraron en Bruselas y el titular luso de Justicia y presidente de turno de la UE, Alberto Costa, no tuvo más remedio que admitir al término de la reunión que no se logró convencer a Polonia.
"Lamentablemente no ha sido posible ponerse de acuerdo, pero eso no significa que los Estados miembros no mantengan su fuerte compromiso en contra de la pena de muerte en el mundo", resumió. Polonia plantea incluir el aborto y la eutanasia en un debate sobre el derecho a la vida que el resto de la UE se niega a abrir.
Así, para salir del apuro, se ha decidido celebrar en Lisboa el día 9 de octubre una Conferencia de Alto Nivel para promover el rechazo de la pena de muerte, donde estarán presentes todas las instituciones comunitarias.
Tanto el ministro portugués como el comisario europeo de Justicia, Libertad y Seguridad, Franco Frattini, se esforzaron con escaso éxito en disipar la imagen de falta de unidad que traslucía el resultado del almuerzo de hoy y resaltaron una y otra vez que no está en entredicho la clara posición europea sobre la pena capital.
"Estamos en contra de la pena de muerte porque va en contra de nuestros principios. Existe un debate muy importante aunque no sea posible de manera formal celebrar un Día Europeo", dijo Frattini, que no dudó en proclamar que la UE está "unida" y "habla con una sola voz" sobre la pena de muerte.
Costa, en la misma línea, dijo que "una cosa es crear un Día Europeo y otra es contribuir día tras día y mes tras mes a luchar contra la pena de muerte". El ministro reiteró que la postura de Polonia sobre este asunto concreto no "menoscaba" la fuerza de la UE al respecto, pero que hoy no se ha logrado la declaración al necesitarse la unanimidad para sacarla adelante.
"Polonia ha reiterado su posición y por eso no hay acuerdo sobre el Día Europeo contra la pena de muerte, pero es obvio que Polonia ni mantiene ni defiende la pena de muerte", agregó el titular luso de Justicia. Costa y Frattini ciñeron la polémica a la cuestión "simbólica" para evitar que se "malinterprete" el debate. "Todos los días se puede luchar contra la pena de muerte", argumentó Frattini.
Por su parte, el ministro español de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, confió en que la posición polaca no sea más que una "resistencia transitoria" que podría desaparecer si cambian las "circunstancias internas o políticas" de Polonia.
"Hemos hecho todos un gran esfuerzo por convencer a nuestro colega sobre la necesidad de decir públicamente que se condena la pena de muerte y que está expulsada del ámbito cultural de la UE pero no ha habido éxito de momento", relató Fernández Bermejo.
"El conjunto de los 27 reafirman que la pena de muerte no debe formar parte del catálogo de reacciones de los Estados frente a la delincuencia pero, de momento, sólo hay 26 que quieren hacer una celebración y, por tanto, simbolizar en un día concreto ese rechazo", explicó el titular español.
Bermejo, a quien la posición polaca le recuerda "tiempos lejanos" dijo haber ayudado a su colega polaco a "ensanchar" su campo de reflexión para que al tema del aborto, añadiera el de la manipulación genética, las células madre, el debate de la guerra o las muertes en la construcción o en la carretera. "Todos esos son ámbitos donde se puede hablar de la vida, pero ¿se imaginan dónde nos puede llevar ese debate?", se preguntó.
