EL CAIRO 4 Jul. (EP/AP) -
El Gobierno ha cedido a negociar con líderes del Ejército de Resistencia del Señor (LRA, por sus siglas en inglés) que están acusados de crímenes de guerra por el Tribunal Penal Internacional (TPI), por lo que aumentan sus esperanzas de éxito en las conversaciones para lograr la paz y pese a que en un principio había rechazado esta posibilidad, según confirmó hoy el mediador jefe y vicepresidente del Gobierno del Sur de Sudán, Riek Machar.
Machar afirmó que la delegación ugandesa le aseguró que permitirá que el proceso se extienda más allá del 31 de julio --fecha límite establecida por el presidente ugandés, Yoweri Museveni-- "lo necesario mientras haya progresos en las negociaciones".
Machar ha liderado los esfuerzos por llevar a la mesa de negociación al Ejército de Resistencia del Señor (LRA), grupo rebelde que durante los últimos 20 años ha matado a miles de personas y desplazado a más de un millón.
Cinco miembros del LRA, incluido el líder Joseph Kony, al que el TPI acusa de crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra. Hasta ahora, el Gobierno ugandés se había negado a negociar con el LRA y menos aún si alguno de los cinco comandantes se encontraba en la delegación rebelde.
Así, el vicepresidente de la región del Sur de Sudán, afirmó que sus conversaciones con el Gobierno ugandés, cuya delegación se encuentra en Juba (capital de la región sudanesa) y está encabezada por el ministro del Interior, Ruhakana Rugunda, han dado muy buenos resultados.
"Incluso han declarado que negociarán con una delegación que esté encabezada por cualquiera de los cinco requeridos por el TPI", afirmó. "La delegación del LRA puede estar encabezada por cualquiera, incluso por Kony", añadió.