CIUDAD DE VATICANO, 6 Ene. (EP/AP) -
El Papa Benedicto XVI emplazó hoy a los líderes religiosos de todas las confesiones a desempeñar un rol activo para impulsar los aspectos y valores espirituales y culturales de la vida y para que éstos no sean olvidados ante los desafíos que presenta en la actualidad la globalización.
En este sentido, en su discurso pronunciado durante la tradicional homilía de la Epifanía en la Basílica de San Pedro, el Pontífice subrayó "la necesidad emergente de elaborar un nuevo orden mundial político y económico, pero ante todo y sobre todo, un (orden) espiritual y cultural, es decir, un humanismo renovado".
"Al comienzo del Tercer Milenio nos encontramos en medio de esta fase de la historia humana que ha sido denominada como globalización", explicó el Papa, al tiempo que subrayó que las pasadas décadas han supuesto enfrentar "un desafío para la civilización global en el que el centro ya no puede ser Europa, ni siquiera aquél que llamamos Occidente o el Norte del mundo".
Asimismo, Benedicto XVI incidió en que mientras políticos, científicos e investigadores desempeñan un imporante papel en el mundo moderno, "hoy más que nunca hace falta colocar a su lado a los líderes de las tradiciones religiosas no cristianas", además de los líderes cristianos.
Fuera de la Basílica de San Pedro, miles de familias se congregaron en la Plaza de San Pedro para recibir al medio día la bendición del Pontífice desde su ventana, rodeados de decoraciones navideñas, incluido el tradicional Belén y un gran árbol navideño.
